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Los calabozos del retén de la Policía Local de Gandia se hicieron con placas de pladur
Un detenido que se comportó violentamente destroza una de las cuatro salas y obliga a repararlo con hormigón o acero - Los sindicatos policiales advirtieron al anterior Gobierno local del PP de esa y otras deficiencias antes de que se inaugurara
S. S. | Gandia 07.09.2017 | 04:15
Los calabozos del retén de la Policía Local de Gandia se hicieron con placas de pladur
Los calabozos del retén de la Policía Local de Gandia se hicieron con placas de pladur
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Por sorprendente que parezca, las cuatro salas que conforman el depósito de detenidos del flamante retén de la Policía Local de Gandia, inaugurado hace dos años y medio, se recubrieron con planchas de pladur, un material de escasa resistencia. Los elementos para la higiene de los detenidos no reúnen las condiciones exigidas, y las ventanas se instalaron de manera que una persona puede arrancarlas con sus propias manos.
Los primeros en poner en alerta esas y muchas otras deficiencias del retén policial, que fue uno de los proyectos estrella del anterior Gobierno local del PP, fueron los sindicatos policiales, pero entonces el alcalde, Arturo Torró, no les hizo caso.
Ha sido este fin de semana cuando la alerta se ha convertido en realidad. Una persona que fue detenida por la Policía Nacional tras una larga persecución que terminó en Llaurí ha sacado los colores a los técnicos y políticos que diseñaron y aprobaron esa instalación.
El hombre, que desde que fue detenido mantuvo una actitud muy violenta, arremetió contra las paredes y la instalación del calabozo en el que había sido confinado, arrancando pedazos de pared, la reja de la ventana y causando otros daños que ahora se están valorando para su reparación.
«Nuestra sorpresa fue comprobar que una sola persona, con sus propias manos, fue capaz de causar graves desperfectos en el calabozo», dijo ayer la concejala de Seguridad, Àngels Pérez, quien consideró «incomprensible» que el anterior Gobierno local «fuera tan inconsciente de permitir este tipo de acabados en una zona tan sensible».
Para Pérez y el responsable de Urbanismo, Vicent Mascarell, esta es «una prueba más de la política que aplicaba el PP: mucha foto y actos inaugurales con un decorado que se sostenía con muros de cartón piedra». «Sería de chiste si no fuera porque estamos hablando de una cuestión muy seria», concluyó Mascarell.
Ahora el ayuntamiento reparará el calabozo destrozado pero usando hormigón o acero para que puedan resistir actitudes violentas de los detenidos.
En su día, los sindicatos policiales alertaron sobre la facilidad con la que una persona arrestada podría desmontar o arrancar elementos de fontanería o de los sanitarios, con el riesgo que ello supone, tanto para los agentes como para los detenidos que intenten autolesionarse. De hecho, el que del sábado pasado causó los destrozos se produjo cortes en las manos que obligaron a trasladarlo al hospital, en donde fue atendido por los médicos.
Al tener conocimiento de estos hechos y de las críticas del de Pérez y Mascarell hacia la gestión realizada en la anterior legislatura, el PP de Gandia emitió una nota en la que señalaron que «ante las supuestas deficiencias en el retén policial, el gobierno popular encargó su construcción de conformidad con los correspondientes informes técnicos, donde se indica, entre otros, los materiales».
El PP lamentó «que se cuestione la capacidad de los técnicos», y solicitó a los dos representantes socialistas «elegancia y respeto hacia el funcionariado del ayuntamiento». Finalmente, recuerdan que fue el PP y el alcalde Arturo Torró quien cumplió la promesa de disponer de un nuevo retén policial que sustituyó el obsoleto de la carretera de Almoines.
http://www.levante-emv.com/safor/2017/0 ... 12414.html