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SUCESO | Sólo llevaba 5 días en la cárcel
Un 'Spiderman' marroquí se fuga de Martutene
La Ertzaintza le detuvo después de que el preso sortease dos muros
También eludió detectores de movimiento y una valla metálica
Ha sido trasladado a Nanclares de la Oca, con paredes menos vulnerables
Juanfer F. Calderín |
Actualizado jueves 07/06/2012 21:33 horas
No daban crédito. Los funcionarios y el director de la cárcel de Martutene quedaron pasmados cuando en torno a las 14.00 horas de este jueves agentes de la Ertzaintza 'tocaron el timbre' del penal donostiarra para devolver a su celda a A. J., un 'Spiderman' marroquí que pese a que sólo llevaba cinco días en la penitenciaría logró escapar de las instalaciones a medio día.
Fuentes de la cárcel de Martutene aseguraron a ELMUNDO.es que burló todas las medidas de seguridad. Eso sí, lo hizo tras urdir un plan 'a priori' imposible de materializar.
La penitenciaría alberga dos patios, el de "frontones" y el de "comunicaciones". La huida se produjo en el primero de ellos.
Este abre sus puertas a los presos entre las 10.00 y las 13.00 horas, cuando los internos son llamados a comer. A. J., no obstante, aprovechó ese espacio temporal para, según relataron las mismas fuentes, acurrucarse en el techo de una antigua garita. "Si se coloca ahí, el funcionario no puede verle cuando revisa el patio".
Cuando el preso constató que no había nadie, se dirigió a una de las esquinas del recinto y trepó un muro de "ocho metros" aprovechando las ventanas de las celdas y los huecos de una pared que pese a las demandas de los sindicatos penitenciarios no ha sido alisada.
No fue fácil. Una vez arriba, A. J. se encontró con un enjambre de alambre que logró sortear. Tras el primer muro, Martutene alberga una zona de seguridad con sensores de movimiento. Nada serio para este Spiderman, pues esquivó todas las medidas de seguridad y volvió a trepar un segundo muro, esta vez de entre cuatro y cinco metros de altura.
La libertad estaba a un paso. A. J. sólo debía volver a 'saltar' una valla metálica de cuatro metros de altura. Lo hizo, pero le cazaron. La patrulla de la Ertzaintza que custodia la garita exterior del penal le vio y le atrapó cuando A. J. ya pisaba suelo libre.
Volvió a ingresar en la cárcel en torno a las 14.00 horas. Fuentes del penal, además, anunciaron a este periódico que a primera hora de la tarde de este jueves Instituciones Penitenciarias decidió trasladarle a Nanclares de la Oca (Álava). ¿Por qué? Las instalaciones alavesas sí que pueden frenar los intentos de evasión de un preso capaz de trepar muros de ocho metros.
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/06/07/paisvasco/1339097603.html