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Primer laboratorio cocaína con misma estructura Sudamérica

NotaPublicado: Dom, 25 Sep 2022, 23:14
por Bávaro
OPERACIÓN ANTIDROGA
Desmantelado un laboratorio de cocaína en el que se usaban métodos nunca vistos por la Policía en nuestro país

Durante la operación se han detenido a 12 personas, entre ellas el cabecilla de la banda y su lugarteniente, que residían en la provincia de Málaga

Málaga
Tiempo de lectura: 4' 24 sep 2022 - 18:32 Actualizado 18:45

Agentes de la Policía Nacional han desmantelado el primer laboratorio de producción de cocaína localizado en España con una estructura igual que la utilizada en los instalados en Sudamérica, con capacidad para producir 120 kilos de droga semanales. En esta operación se ha detenido a doce personas, entre ellas el líder de la organización y su lugarteniente, y se han realizado diez registros en Málaga, Madrid y Córdoba. Debido a la peligrosidad de la operación, la entrada en el laboratorio –que se encontraba en una localidad próxima a Madrid- fue realizada por el Grupo Especial de Operaciones (GEO) y en su interior, se encontraban cinco “cocineros” en pleno proceso de extracción de la droga.

En el mes de mayo de este año se inició una investigación sobre una organización criminal que contaba con una gran capacidad operativa para desarrollar su actividad ilícita. El líder y su lugarteniente, que residían en la provincia de Málaga y llevaban un alto tren de vida, controlaban, a través de terceros, empresas de importación de sacos de cemento en cuyos cargamentos ocultaban sustancia estupefaciente que nutría al laboratorio clandestino desmantelado en Madrid.

A partir de ese momento empezó a gestarse la “operación Silcon”. Los agentes lograron identificar al líder de la organización, un ciudadano español, así como al resto de miembros de la misma. Además comprobaron que estas personas se estaban abasteciendo de una gran cantidad de productos químicos, así como de todos los materiales necesarios para poder establecer el laboratorio. Para este cometido, el grupo disponía de un trastero en Córdoba donde almacenaba disolventes para, pasados unos meses y como medida de seguridad, trasladarlos hasta un contenedor marítimo ubicado en un parking de vehículos de la Costa del Sol.

A medida que avanzaba la investigación, se pudo identificar a otro ciudadano dominicano, persona de confianza del líder, que se encargaba directamente de la supervisión del proceso de elaboración de la droga en el laboratorio y de organizar su distribución. Este hombre reclutó personalmente a tres ciudadanos colombianos que vinieron a España expresamente para la extracción de la sustancia estupefaciente. Estas personas, conocidas como “cocineros”, son contratadas normalmente para una operación concreta y cobran según el número de kilos extraídos, para regresar posteriormente a su país.

Los investigadores comprobaron que la organización había alquilado un chalet de grandes dimensiones en la localidad de Coín (Málaga), que sería en un primer momento donde se ubicase el laboratorio, aunque por seguridad, decidieron finalmente su instalación en la provincia de Madrid. Para el traslado de la sustancia estupefaciente, los miembros del grupo la introducían en sacos con cemento y adoptaban grandes medidas de seguridad, como el empleo de vehículos lanzadera. El destino de los sacos fue, en principio un lavadero de coches gestionado por miembros de la organización, y posteriormente una finca rural de grandes dimensiones, ubicados ambos puntos en localidades próximas a la capital. A partir de ese momento, la finca permaneció vigilada por los agentes que observaron cómo se trasladaban hasta el lugar los “cocineros” encargados de las tareas de extracción y producción de la sustancia estupefaciente.

MISMA ESTRUCTURA QUE EN SUDAMÉRICA

El día seis de septiembre se llevó a cabo el desarrollo de la operación en la que se detuvo a nueve personas. Además se realizaron diez registros domiciliarios, logrando desarticular plenamente la organización, cuando días después se detuvo a otros tres integrantes.

Como detalle novedoso de esta operación, que nunca había sido visto por los especialistas en desmantelamiento de laboratorios hasta este momento en nuestro país, es el modo de recuperación de la cocaína, ya que se asemeja a los instalados en la selva sudamericana. Por un lado, normalmente, estos laboratorios se instalan en el interior de casas, naves o chalets para evitar así ser controlados o llamar la atención de los vecinos y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Este laboratorio, sin embargo, se ubicaba en el exterior de una finca de grandes dimensiones y bajo la maleza, únicamente protegido por unas sombrillas y lonas que intentaban ocultar su actividad ante la actuación de algún medio aéreo.

Por otro lado, el método utilizado para la extracción de la pasta base de la cocaína reflejaba los grandes conocimientos de los “cocineros” en esta materia ya que, normalmente las organizaciones recurren al uso de gran cantidad de productos químicos, muchos de ellos fiscalizados por los convenios internacionales; sin embargo, los detenidos utilizaban únicamente para este proceso gasolina, amoníaco y agua. Cabe destacar, además, las fuertes medidas de seguridad adoptadas por los responsables del laboratorio, ya que, vigilaban la finca mediante el uso de un dron.

INTERVENCIÓN
Tras la actuación policial, los agentes intervinieron en el laboratorio 85 kilos de pasta base en diferentes procesos de conversión a clorhidrato de cocaína, así como todo el utillaje necesario para su manipulación y transformación.

En la provincia de Málaga se detuvo al jefe del grupo y su lugarteniente, desmantelando así la cúpula de la organización. Además se llevaron a cabo seis registros domiciliarios en Málaga, tres en Madrid y uno más en Córdoba y se incautó un vehículo en el que se encontraba una pistola con seis cartuchos lista para usar, así como dinero en efectivo y documentación. En un contenedor de un parking se intervinieron también gran cantidad de productos químicos, tanto líquidos como sólidos, que esperaban a ser utilizados para la extracción en futuras operaciones llevadas a cabo por esta organización.

En total se han intervenido 85 kilos de pasta base de cocaína, 250 kilogramos de cemento impregnado en cocaína, 950 litros de precursores químicos, 125 kilos de precursores sólidos, seis vehículos y 36.000 euros.

https://www.cope.es/emisoras/andalucia/ ... 24_2307107

Re: Primer laboratorio cocaína con misma estructura Sudaméri

NotaPublicado: Lun, 26 Sep 2022, 23:49
por Bávaro
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desenfunda.com
Tres expertos ‘cocineros’ para una narcofinca al estilo colombiano escondida en medio de la sierra de Madrid

La Policía desmantela por primera vez un laboratorio en suelo español al aire libre y con un método de tratamiento de la cocaína con muy pocos productos químicos

PATRICIA PEIRÓ
Madrid - 26 SEPT 2022 - 05:00 CEST

Entre gallinas, vacas y juguetes, los tres cocineros trabajan la droga que llegaba cada día a la finca en cantidades industriales. Hasta 120 kilos semanales oculta en sacos de cemento. Así pasaban los días, rodeados de encinas y animales, los tres expertos en tratamiento de cocaína traídos especialmente desde Colombia hasta Navalagamella, un pequeño pueblo de la sierra de Madrid. Hasta que el 6 de septiembre todo se vino abajo, cuando un numeroso grupo del equipo de élite de la Policía Nacional, los GEO, se desplegó en el inmenso terreno y desbarató el negocio. Los especialistas del cuerpo en este tipo de laboratorios nunca habían visto una estructura así en territorio español, más semejante a los que se encuentran en la selva.

“No sabemos si es porque la casa era de pequeñas dimensiones o cuál es el motivo de que lo montaran todo al aire libre, pero no es lo que nos encontramos normalmente”, explica un miembro del operativo que ese día entró en la finca después de meses de investigación. En el momento en el que se desarticuló la red, se intervinieron 85 kilos de pasta base de cocaína, 250 kilogramos de cemento impregnado en esta droga, 950 litros de precursores químicos, seis vehículos y 36.000 euros. En este caso, el plan inicial era establecer el laboratorio en un chalet de Coín (Málaga), un modo de proceder que se asemeja más a los que los agentes especializados han visto anteriormente en este tipo de organizaciones: en un espacio cerrado de grandes dimensiones.

No solo se parecía a los laboratorios del otro lado del Atlántico en la estructura, sino también en el método de tratamiento de la coca. “Mientras que en otras ocasiones hacen uso de muchos elementos químicos que están sometidos a controles en el momento de su compra, esta vez solo usaban gasolina, amoniaco y agua, lo que demuestra el gran conocimiento que tenían de la técnica”, añade este agente. Estos productos los ocultaban en un almacén en Córdoba, que trasladaban hasta Madrid cuando se les iban agotando.

En un punto de la finca, de una extensión considerable, se levantaba una pequeña cabaña de madera en la que se amontonaban los tres cocineros, como se conoce a los expertos en elaborar la cocaína para su venta, una especie de capataz y otro miembro de la organización. La propiedad pertenece a la hermana de uno de los integrantes de la red criminal. En el operativo han sido detenidas 12 personas, entre ellas el cabecilla, un español afincado en la Costa del Sol, a los que los policías veían habitualmente moverse en coches de alta gama. “Hasta cinco o seis vehículos de lujo”, remata el policía participante en la investigación.

En uno de esos coches, los policías encontraron una pistola que el líder de la banda portaba para defenderse de posibles enemigos. Se trata de un delincuente de unos 40 años, viejo conocido de la policía por su relación con otras operaciones de narcotráfico. “Había estado relacionado con la Reina de la Coca [Ana María Cameno]”, señala este policía que ha seguido de cerca los pasos de la organización desmantelada.

De la provincia de Málaga partían habitualmente comitivas con la droga que después trataban en este municipio madrileño cercano a El Escorial. “Los furgones en los que cargaban los bloques de cemento estaban muy vigilados y al frente de la comitiva siempre iba un coche lanzadera para alertar de posibles sorpresas”, indica el policía. La zona en la que trataban la cocaína estaba cubierta por unas lonas y sombrillas colocadas de forma anárquica, para evitar posibles vigilancias desde el cielo. De hecho, eran ellos los que ejercían la vigilancia aérea, gracias a un dron que sobrevolaba la inmensidad de la finca constantemente. También había miembros de seguridad en los extremos del terreno con transmisores para comunicarse entre ellos.

Además de los animales que vivían en el campo, los agentes encontraron juguetes de los niños de la familia propietaria del terreno, así como otros objetos personales. Todos ellos impregnados del fuerte olor a gasolina que desprendían los bidones. “Los cocineros llegaron en tres vuelos independientes de Colombia para levantar menos sospechas. Muchas veces, una vez que aterrizan, les tapan los ojos y ni ellos mismos saben dónde los han llevado”, indica el agente que ha participado en la operación. Esta vez, no pudieron cerrar sus ojos ante la inesperada llegada de los GEO entre un montón de gallinas.

https://elpais.com/espana/madrid/2022-0 ... adrid.html