Página 1 de 1

Detenida por el crimen del hombre emparedado en Benimaclet

NotaPublicado: Lun, 01 Abr 2019, 23:09
por Bávaro
Una mujer, detenida por el crimen del hombre emparedado en Benimaclet

La Policía Nacional esclarece un homicidio cometido hace una década en una vivienda tras identificar a todas las personas que residieron en la casa

JAVIER MARTÍNEZ VALENCIA.
Lunes, 1 abril 2019, 10:31

El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional de Valencia ha logrado esclarecer un horrendo crimen cometido hace una década en un piso de Benimaclet, donde fue hallado el cadáver de un hombre dentro de un pequeño habitáculo construido con ladrillos, tras una ardua investigación que ha durado nueve meses.

Los agentes que asumieron el caso detuvieron a una mujer por su implicación en el homicidio e identificaron también al presunto autor del crimen. La víctima y los dos sospechosos son naturales de países de Europa del Este y residieron en la vivienda donde un obrero descubrió el cadáver, aunque uno de los hombres no estaba inscrito en el padrón municipal.

Tras ser interrogada por la policía y el juez que instruye el caso, la mujer quedó en libertad provisional, pero con la obligación de comparecer de forma periódica en un juzgado para firmar. Además, la sospechosa tiene prohibido salir de España y el magistrado acordó la retirada de su pasaporte mientras continúan las investigaciones. El juez adoptó estas medidas cautelares al considerar que la mujer tiene arraigo en España y no hay riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas.

El autor material abandonó España hace años pero la policía lo tiene identificado

El macabro hallazgo tuvo lugar sobre las siete de la tarde del 17 de marzo de 2018 en una vivienda de la calle Doctor Vicente Zaragozá en el barrio de Benimaclet. Uno de los obreros que estaban reformando el piso halló el cuerpo esqueletizado cuando rompió un pequeño habitáculo en un patio interior.

Según las investigaciones policiales, el homicida construyó con ladrillos un sepulcro en la esquina de dos paredes para ocultar el cadáver del hombre antes de abandonar la casa. También cortó las manos de la víctima y se deshizo de su documentación para dificultar la identificación del cuerpo en el caso de que alguien lo descubriera. El esqueleto momificado fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Valencia para que los forenses determinaran la fecha y las causas de la muerte, mientras los agentes de la Brigada Provincial de Policía Científica y del Grupo de Homicidios realizaban también indagaciones para identificar a la víctima.

Murió de varias cuchilladas
La autopsia desveló que el hombre falleció como consecuencia de varias cuchilladas en zonas vitales, pero los forenses no pudieron concretar con exactitud cuántos años habían transcurrido desde la muerte. El estado del cadáver y la forma de ocultación dificultó el examen del cuerpo realizado por antropólogos forenses.

El esqueleto fue descubierto de forma casual por uno de los albañiles contratados por los dueños del piso. Los restos humanos se encontraban tapados con una bolsa de plástico y la víctima estaba vestida con un pantalón de tergal y una cazadora, entre otras prendas. Tras el macabro hallazgo, los propietarios de la vivienda explicaron a la policía que había adquirido el piso a través de una inmobiliaria, y facilitaron a los investigadores la dirección de la agencia y el nombre de la anterior dueña de la casa. Tras las primeras pesquisas, los agentes del Grupo de Homicidios averiguaron que la vivienda estuvo vacía varios años, y que los últimos moradores habían sido una pareja de Europa del Este. En este piso también estuvieron empadronadas una persona de nacionalidad ucraniana y otra natural de Lituania, según recordaban los vecinos del edificio.

Dueños e inquilinos del piso
Los investigadores centraron sus indagaciones en la identificación y localización de todos los dueños e inquilinos que había tenido la vivienda en los últimos 20 años, así como su posible relación con algún caso sin resolver de personas desaparecidas en España. El edificio donde fue hallado el cadáver momificado tiene 36 viviendas distribuidas en nueve plantas y algunos de los pisos están ocupados por jóvenes universitarios. Muy pocos vecinos recordaban a los últimos inquilinos de la puerta 3, donde tuvo lugar el crimen hace cerca de 10 años.

Según consta en el padrón municipal, la última persona que habitó la vivienda es un hombre nacido hace 42 años en Letonia, cuya identidad responde a las iniciales E. S., aunque entre los años 2010 y 2012 también residieron en la casa una mujer ucraniana de 60 años, otra nacida en Lituania hace 37 años y el hijo pequeño de esta última inquilina.

Los agentes del Grupo de Homicidios localizaron e interrogaron a a varias de estas personas para identificar a la víctima y reconstruir sus últimos días de vida en Valencia, aunque estas pesquisas no resultaron fácil por la falta de colaboración de la mujer detenida.

El presunto autor del homicidio abandonó España antes de que el obrero encontrara el cadáver el 17 de marzo de 2018, pero ha sido plenamente identificado por la policía. La mujer arrestada como presunta coautora del homicidio se estableció hace unos años en las Islas Canarias. Los investigadores se encuentran a la espera del resultado de unas pruebas biológicas para determinar el grado de implicación de cada uno de los sospechosos, según informaron las mismas fuentes jurídicas.

https://www.lasprovincias.es/sucesos/mu ... -ntvo.html