FORO POLICIA

Unos policías salvan a una joven a la que se había dado por muerta

La chica estaba totalmente sumergida en una bañera y tenía las venas cortadas

Cuatro agentes de la comisaría de Salamanca la sacaron y consiguieron reanimarla

PABLO HERRAIZ Actualizado: 26/04/2014 00:19 horas

La llamada que se recibió en el 091 era tajante: había un cadáver en la bañera. Pero las cosas fueron bien distintas, aunque quizá uno o dos minutos más y habría sido cierto. Dos coches patrulla de la comisaría del distrito de Salamanca estaban muy cerca del hotel que dio la voz de alarma. El suceso ocurrió el pasado Jueves Santo, a las 13.15 horas aproximadamente.

En una habitación del hotel Abba en la Avenida de América estaba la chica, colombiana de 19 años, y como ya había pasado la hora del check out y la joven no cogía el teléfono, el recepcionista entró en la habitación. La imagen era dura: una joven sumergida en la bañera hasta la frente, el agua teñida de rojo oscuro, un olor indescriptible. El recepcionista bajó corriendo y llamó al teléfono de emergencias. Los dos coches patrulla que estaban cerca llegaron enseguida y empezaron a subir corriendo a la habitación. Allí se cruzaron con una mujer de la limpieza que, agorera, les dijo. «Está muerta, no corran».

Los cuatro policías, todos chicos jóvenes, entraron en la habitación y sacaron como pudieron el cuerpo de la chica. Como estaba desvanecida, parecía que no lo iban a conseguir. «Nos costó mucho trabajo. Entre los cuatro la agarramos pero casi no podíamos con ella, porque no podía ayudarnos nada. Después la pusimos en el suelo y le empezamos a tapar las heridas con toallas limpias que nos dio la señora de la limpieza», relataban ayer Guillermo y Rocío, dos de los patrulleros que intervinieron.

Uno de los agentes empezó a hacerle maniobras de reanimación, otro le daba cachetes para ver si se desperezaba. «En unos segundos la chica empezó a convulsionar, y después abrió los ojos», recordaban ayer los agentes de la comisaría de Salamanca.

A los 10 minutos, más o menos, llegaron los médicos de emergencia, que se hicieron cargo de la chica y le llevaron al hospital de La Princesa. La joven tuvo mucha suerte, porque si llega a pasar un poco más de tiempo bajo el agua habría perecido ahogada, y si hubiera tenido la cabeza fuera del agua se habría desangrado en pocos minutos, porque los cortes que se había hecho en ambas muñecas con un cuchilla de afeitar eran muy profundos.

Después se supo que el día antes, los padres de la víctima habían presentado una denuncia por desaparición. La joven vivía en un piso compartido porque está nacionalizada española, pero vivía fuera de Madrid y vino a la capital para estudiar.

Al parecer, se marchó del piso y alquiló una habitación en el hotel, donde pasó todo el día anterior al Jueves Santo sola. Como siempre ocurre en estos casos, nadie se esperaba que la joven intentara matarse, aunque esta vez tuvo la fortuna de que la salvaran los policías.

Fuente: http://www.elmundo.es/madrid/2014/04/26/535a9977268e3e5e688b4581.html

Enhorabuena señores