Sargento condenado a 3 años de prisión por detención ilegal
Publicado: Dom, 27 Ene 2019, 22:56Tres años de cárcel a un sargento de la Benemérita tras una detención ilegal
26/01/2019
Mantuvo retenidas a dos mujeres durante cuatro horas porque, presuntamente, le habían robado la cartera a un varón en la playa sin que hubiese denuncia. Luego, falseó el atestado y las diligencias.
El sargento de la Guardia Civil Carlos Cebreiro ha sido condenado a tres años de prisión, siete de inhabilitación para el ejercicio de cualquier cargo o empleo público y 1.800 euros de multa por haber ordenado detener ilegalmente a dos mujeres y falsear posteriormente todo el expediente cuando estaba destinado en el puesto de la Benemérita en Morro Jable (Fuerteventura). En este procedimiento también había sido acusado otro agente como cómplice, pero el Tribunal no ha considerado acreditados los hechos que se le imputaban, por lo que fue absuelto.
Fue la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas la que sentó en el banquillo a estos dos guardias civiles, que en la vista oral negaron todos los hechos que les imputaba el Ministerio Fiscal. Según la resolución, firmada por la magistrada ponente Mónica Herreras, tras la práctica de la prueba quedó demostrado que en la mañana del 20 de agosto de 2012, el guardia que resultó absuelto, por orden del sargento Carlos Cebreiro, se puso en contacto con dos mujeres para que fueran al puesto de la Guardia Civil de Morro Jable por la supuesta implicación de éstas en un delito de hurto cometido en la playa.
Fue sobre las 17.00 horas cuando las dos protagonistas llegaron al cuartelillo y, a pesar de que el sargento tenía conocimiento de que el varón al que supuestamente le habían robado la cartera no quería presentar denuncia, «las mantuvo retenidas casi cuatro horas» en contra de la legalidad puesto que «no existían indicios de criminalidad frente a ellas», sostiene la sentencia.
Según la versión del condenado, un hijo de la persona a la que supuestamente robaron le comunicó que su padre se había ido «con dos prostitutas a la playa y que cuando estaba desnudo se llevaron sus pantalones y la cartera». Por ese motivo, ordenó al otro agente «que las localizase» pero teniendo en cuenta que la víctima «no lo iba a denunciar porque le daba vergüenza y no quería que se enterase su mujer». Esta tesis, según el Tribunal, carece de veracidad puesto que el atestado policial instruido por el sargento nueve días después de los hechos fue «ilegal» ya que «ninguna diligencia» fue instruida en el momento de la detención. «Tampoco se genero novedad informando a los superiores jerárquicos de la detención de dos personas, del mismo modo no consta que se remitiese al Juzgado de instrucción Nº 5 de Puerto del Rosario el atestado así como tampoco se informó al Juzgado de Guardia de la detención de dos personas», sostiene la resolución.
«Resulta racionalmente inadmisible que la elaboración a posteriori del atestado y del hecho, sean fruto de un mero error en el que habrían incurrido alguno de los agentes a los que supuestamente el acusado había facilitado sus claves –del sistema informático del cuartel–, sin especificar cual», detalló el fallo, que calificó como «vagas excusas» las ofrecidas por el condenado durante la vista oral.
En el caso de otro agente investigado, el tribunal entiende que «debe primar la presunción de inocencia por cuanto únicamente consta acreditada su participación en el requerimiento telefónico que realizó» a una de las mujeres «para que se personase junto a su amiga en las dependencias policiales, tal y como le ordenó su sargento ante la presunta comisión por parte de aquéllas de un hecho delictivo» que no fue ni siquiera denunciado.
https://www.canarias7.es/sociedad/tres- ... -IC6455318
26/01/2019
Mantuvo retenidas a dos mujeres durante cuatro horas porque, presuntamente, le habían robado la cartera a un varón en la playa sin que hubiese denuncia. Luego, falseó el atestado y las diligencias.
El sargento de la Guardia Civil Carlos Cebreiro ha sido condenado a tres años de prisión, siete de inhabilitación para el ejercicio de cualquier cargo o empleo público y 1.800 euros de multa por haber ordenado detener ilegalmente a dos mujeres y falsear posteriormente todo el expediente cuando estaba destinado en el puesto de la Benemérita en Morro Jable (Fuerteventura). En este procedimiento también había sido acusado otro agente como cómplice, pero el Tribunal no ha considerado acreditados los hechos que se le imputaban, por lo que fue absuelto.
Fue la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Las Palmas la que sentó en el banquillo a estos dos guardias civiles, que en la vista oral negaron todos los hechos que les imputaba el Ministerio Fiscal. Según la resolución, firmada por la magistrada ponente Mónica Herreras, tras la práctica de la prueba quedó demostrado que en la mañana del 20 de agosto de 2012, el guardia que resultó absuelto, por orden del sargento Carlos Cebreiro, se puso en contacto con dos mujeres para que fueran al puesto de la Guardia Civil de Morro Jable por la supuesta implicación de éstas en un delito de hurto cometido en la playa.
Fue sobre las 17.00 horas cuando las dos protagonistas llegaron al cuartelillo y, a pesar de que el sargento tenía conocimiento de que el varón al que supuestamente le habían robado la cartera no quería presentar denuncia, «las mantuvo retenidas casi cuatro horas» en contra de la legalidad puesto que «no existían indicios de criminalidad frente a ellas», sostiene la sentencia.
Según la versión del condenado, un hijo de la persona a la que supuestamente robaron le comunicó que su padre se había ido «con dos prostitutas a la playa y que cuando estaba desnudo se llevaron sus pantalones y la cartera». Por ese motivo, ordenó al otro agente «que las localizase» pero teniendo en cuenta que la víctima «no lo iba a denunciar porque le daba vergüenza y no quería que se enterase su mujer». Esta tesis, según el Tribunal, carece de veracidad puesto que el atestado policial instruido por el sargento nueve días después de los hechos fue «ilegal» ya que «ninguna diligencia» fue instruida en el momento de la detención. «Tampoco se genero novedad informando a los superiores jerárquicos de la detención de dos personas, del mismo modo no consta que se remitiese al Juzgado de instrucción Nº 5 de Puerto del Rosario el atestado así como tampoco se informó al Juzgado de Guardia de la detención de dos personas», sostiene la resolución.
«Resulta racionalmente inadmisible que la elaboración a posteriori del atestado y del hecho, sean fruto de un mero error en el que habrían incurrido alguno de los agentes a los que supuestamente el acusado había facilitado sus claves –del sistema informático del cuartel–, sin especificar cual», detalló el fallo, que calificó como «vagas excusas» las ofrecidas por el condenado durante la vista oral.
En el caso de otro agente investigado, el tribunal entiende que «debe primar la presunción de inocencia por cuanto únicamente consta acreditada su participación en el requerimiento telefónico que realizó» a una de las mujeres «para que se personase junto a su amiga en las dependencias policiales, tal y como le ordenó su sargento ante la presunta comisión por parte de aquéllas de un hecho delictivo» que no fue ni siquiera denunciado.
https://www.canarias7.es/sociedad/tres- ... -IC6455318
