Hay muchas razones que pueden atraerte para ser policía pero para mí hay una que es fundamental y que te has dejado en el tintero: el compañerismo y el trabajo en equipo. Ya sea por binomios o por grupos, es algo vital y que desde mi época de opositor hasta ahora que he cumplido un trienio, siempre me ha gustado.
Y más en ciertas unidades, o a nivel de Zetas, que tu compañero de patrulla con el paso de los años puede acabar siendo como tu hermano/a o el padrino de tu boda.