Yo lo que pienso es que los que tienen que estar dando gracias a Dios por no haber resultado heridos o muertos son los vigilantes municipales. Montar ese tipo de servicios sin armas es una temeridad absoluta, quien lo ordene tiene que tener poca humanidad.
Como dice Chino94372, si un Ayuntamiento quiere seguridad pública municipal que pague policías, y no que contrate vigilantes porque salen mucho más baratos.
Otra manifestación de la precariedad laboral en este país. Ah, no, que los policías no somos trabajadores.
Por cierto, por lo que recuerdo juraría que ninguna de las dos compañeras asesinadas en Córdoba iba armada, y eso les importó bien poco.