El gobierno local rechaza las presiones de la policía
El ejecutivo da validez al acuerdo salarial firmado en el 2009 pero advierte que no puede cumplirlo ahora sin romper la ley
A Coruña / La Voz
12 de diciembre de 2014 20:37
La huelga de «bolígrafos caídos» de la Policía Local no forzará al Ayuntamiento a aplicar el acuerdo salarial suscrito con los agentes en el 2009. El convenio está bloqueado desde que entró en vigor la ley de estabilidad presupuestaria, una de las medidas más destacadas del Ejecutivo de Rajoy, y el gobierno local está decidido a respetar esa norma mientras siga vigente.
Fuentes del Ayuntamiento señalaron ayer que el acuerdo es válido y recordaron que el pleno aprobó por unanimidad aplicarlo en cuanto sea posible, el problema es que ahora «es imposible, ya que estaríamos cometiendo una ilegalidad», señaló el concejal de Seguridad, Julio Flores.
Pero las explicaciones del gobierno local y su decisión de llevar una moción al pleno para dejar claras sus intenciones de cumplir el pacto no han servido para aplacar los ánimos de los agentes. El descontento en el cuerpo ha ido creciendo en los últimos meses, y ha estallado ahora cuando el terreno para el conflicto está bien abonado gracias a la proximidad de las elecciones del 2015.
No solo influyen las municipales, el año que viene también habrá elecciones sindicales en María Pita y todas las centrales han empezado a moverse. Un ejemplo es el cuerpo de bomberos, donde la CIG tiene gran influencia, que también ha empezado a reivindicar mejoras. Por ahora la explosión de la policía está estudiada y se han evitado las protestas durísimas, incluso con amenazas personales, que se vivieron en anteriores mandatos. Por el momento se quedan en «bolígrafos caídos», es decir la negativa a hacer horas extraordinarias.
Esa forma de protesta no es casual. El 12 de noviembre se celebró una asamblea del CSIF, el sindicato mayoritario en el cuerpo, en la que se propusieron medidas muy severas, pero al final se impuso el criterio de Manuel Aceña, presidente de la central y de la junta de personal, que pidió que se tuviese en cuenta la situación social. Así, los policías renunciarán a buena parte de sus ingresos para protestar, pero complicarán mucho la vida a sus superiores, tanto del cuerpo como políticos. Todos los dispositivos especiales (tráfico los días de fútbol, cabalgata, comercio y tráfico en Navidades, movida nocturna?) dependen de agentes que hacen horas extras. Esa opción ya no está sobre la mesa y los mandos tendrán que tirar con los agentes del turno ordinario, lo que restringirá el personal disponible y complicará todas las operaciones. Pese a todo el gobierno local insistió ayer en que la cabalgata y el resto de las actividades navideñas se desarrollarán con normalidad
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/co ... 2C3993.htm