Los policías de Madrid conviven a diario con los delincuentes que detienen
Muchos policías municipales de Madrid tienen que convivir durante meses con algunos de los delincuentes que detienen. Esta paradójica situación ocurre porque, gracias a un convenio entre el Ayuntamiento y la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, algunos de los arrestados son condenados a cumplir su pena bajo la figura denominada trabajos en beneficios de la comunidad y algunas de estas labores las llevan a cabo precisamente en dependencias policiales.
Estos malhechores barren los patios, limpian vehículos o se dedican a realizar tareas de mantenimiento de distintos espacios, tanto abiertos como cerrados, en diferentes instalaciones de la Policía Municipal de Madrid. La actividad que hacen, en principio, no conlleva riesgos para los funcionarios o el material, porque siempre hay un agente que supervisa y porque se trata de trabajos que no tocan asuntos relevantes. Sin embargo, algunos consideran que cualquier información es sensible en un espacio policial.
Por ejemplo, varios policías consultados por Seguridad y Tribunales, aseguran haber convivido con los condenados durante meses y son conscientes de que éstos conocen su nombre, sus apellidos e incluso su apodo, pero también el vehículo que conducen –tanto el camuflado como el particular–, cómo está organizada la instalación policial, dónde se encuentra cada departamento, el archivo, los horarios u otro tipo de información que no es adecuado que conozcan personas que, tras cumplir su pena, volverán a su antiguo ambiente. Muchas de ellas, de hecho, no es raro que luego se conviertan en reincidentes.
En algunos casos, además, los condenados a trabajos en beneficios de la comunidad no hacen adecuadamente las tareas que se les han encomendado. Hace unos días, por ejemplo, revela uno de los agentes consultados, uno de estos delincuentes, que prestaba servicios en una instalación de la corporación, cogió la manguera y llenó de agua los tubos de escape de tres motos particulares que pertenecían a agentes de la Policía.
Los daños que se han producido en dos de las motos superan los 2.400 euros. El perjuicio sobre la tercera está en estos momentos en vías de ser cuantificado. El infractor ya no presta servicio en las dependencias y está siendo investigado por estos hechos.
Sin embargo, lo importante del episodio es que muestra las cosas que pueden ocurrir si no se ejerce un control suficiente sobre estas personas. Así lo entienden desde la Asociación de Policía Municipal Unificada (APMU), que consideran que actualmente “no se cumplen las medidas de seguridad para los policías, ya que los penados tienen acceso a datos personales de los agentes e incluso pueden dañar propiedades privadas”, como de hecho ha ocurrido.
Los trabajos en beneficios de la comunidad son la pena alternativa a la prisión más aplicada en España y su concepto están actualmente en expansión. Engloba múltiples tareas y tipologías delictivas.
Fuente: http://www.seguridadytribunales.es/los-policias-de-madrid-conviven-a-diario-con-los-delincuentes-que-detienen/