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La información se basaba en lo que dijo el propio detenido, buscado por otro homicidio diferente
Malestar entre Policía Nacional y Guardia Civil a cuenta del detenido, al que una juez ha enviado a prisión
Laika, el individuo detenido el martes por la noche tras una persecución en Cádiz, no es como se había informado el presunto asesino del cabo primero Dris, de los Regulares de Ceuta, tiroteado en un garaje de la barriada de El Príncipe. La Guardia Civil, que informó del arresto, aclara que esa información se basaba en las manifestaciones del propio detenido. Este contó a los agentes que sabía que la Policía llevaba varias semanas persiguiéndole por su implicación en la muerte del soldado. Tras varias comprobaciones realizadas en las últimas horas, se ha verificado que Laika tenía una requisitoria por un homicidio en Ceuta, pero este no guarda relación con el crimen del cabo. Hasta ahí la información oficial plagada de interrogantes y en la que subyace un evidente malestar.
Laika fue detenido ayer por agentes de la Guardia Civil en Cádiz después de una persecución de película que comenzó después de que se saltara, junto a dos compinches, un control de carretera. El criminal, con multitud de antecedentes, entre ellos alguno por delitos de sangre, era objetivo de las Fuerzas de Seguridad, aunque tras la nueva información, parece que o bien era un objetivo errado, o bien no se le puede implicar directamente en la muerte. Aun así, una juez de Chiclana lo ha enviado a prisión a la espera de que se le tome declaración en Ceuta. La detención y el comunicado inicial ha provocado un cruce de reproches soterrados entre Policía Nacional (responsable de la investigación) y Guardia Civil (el Cuerpo que lo arrestó a él y a dos individuos más).
En el atestado de Policía tras el asesinato del cabo (en realidad el objetivo era su hermano) al parecer no se señala a Laika, pese a que algunos de los implicados en el crimen trabajan a sus órdenes. «Si no es el autor material, al menos es el inductor», explican fuentes de la Guardia Civil. Policía Nacional no lo tiene tan claro e insisten en que la requisitoria es por un homicidio de un adolescente de 15 años que nada tiene que ver con estos hechos.
Tras la persecución peligrosa en la que los agentes tuvieron que hacer uso de los medios de bloqueo, que reventaron las ruedas del vehículo en el que intentaban huir los delincuentes, queda la incógnita de qué situación procesal le espera al delincuente, que junto a sus compinches abandonó el coche en medio de la autovía y los tres emprendieron la huida a pie.
Los hechos ocurrieron durante la tarde de ayer en un control que los agentes del Instituto Armado habían montado en la A-381, en sentido a Jerez, a su paso por el término municipal de Medina Sidonia. Los guardias civiles vieron cómo el conductor de un vehículo circulaba de forma anormalmente lenta. Al ser requerido para su identificación, el conductor aceleró de forma brusca y a punto estuvo a punto de arrollar a uno de los agentes. Además, otro de los tres ocupantes del vehículo arrojaba por la ventanilla tres bolsitas con hachís.
En ese momento la Guardia Civil accionó el dispositivo de bloqueó, que reventó los neumáticos de coche sospechoso, pero aun así emprendió la huida en dirección Jerez de la Frontera, a la máxima velocidad posible. De inmediato los agentes comenzaron la persecución utilizando las señales acústicas y luminosas de los vehículos oficiales. Dos kilómetros después se produjo otro momento de máximo peligro, ya que el conductor detuvo en seco el automóvil en medio de la autovía con la intención de que el vehículo de la Benemérita chocara con ellos.
Los sospechosos huyeron a pie y corrieron a través del campo, pero dos fueron arrestados. El tercero, Laika, tras perder la camiseta y un móvil en su huida, fue interceptado, tras una carrera de más de 40 minutos, cuando accedía al interior de una finca buscando un teléfono con el que pedir ayuda. En su detención fue fundamental la colaboración ciudadana.
Los detenidos fueron trasladados a dependencias del Instituto Armado de Medina Sidonia, y el vehículo retirado mediante grúa de la calzada. Menos de 24 horas después se ha producido la rectificación oficial que no se sabe en qué puede derivar. Por un lado, está la situación procesal del detenido y, por otro, la tensión entre los dos Cuerpos con el crimen de un soldado por medio que además se produjo al mismo tiempo que se llevaba a cabo una intervención policial en el Príncipe.
El cabo primero del Tercio de Regulares Driss A.M., casado y con hijos y destinado en Ceuta fue asesinado a tiros en la madrugada del 9 de octubre en un garaje de la barriada de El Príncipe, en una zona conocida como Poblado Legionario. El crimen sorprendió a la Policía en plena operación contra una organización criminal que opera desde allí y que había protagonizado antes varios tiroteos en ese mismo lugar.
https://www.abc.es/espana/guardia-civil ... 06-nt.html