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Un hombre armado con una lanza pasó un día persiguiendo a otro que huía.
-!Cógelo, cógelo! - dijo al filósofo, pero éste no se movió.
-¿Estás sordo, porque no has parado a aquel asesino?
-¿Un asesino?¿Qué significa esta palabra?
-Un asesino es un hombre que mata.
-Un carnicero, entonces.
-!Viejo loco! Quiero decir un hombre que mata a otro hombre.
-Un soldado, entonces.
-No, un hombre que mata a otro hombre en tiempo de paz.
-Ya lo he comprendido: un verdugo.
-¿Estás loco? Un hombre que mata a otro hombre en su casa.
-Ah, ya se. Un médico
El hombre dejo a Sócrates por inútil y siguió su camino