HEKLER & KOCH P30-FX |
![]() Sistema de entrenamiento fx |
uspsuministros.com |
¿Qué es y quién lo usa?
El polígrafo no es considerado por la mayor parte de la población científica un instrumento capaz de detectar mentiras de forma infalible. Este dispositivo mide una serie de variables (presión sanguínea, frecuencia cardiaca, conductividad de la piel, ritmo respiratorio y movimiento) con gran exactitud y que, algunos defensores de éste, asegurar que nos informan acerca de si un sujeto miente o no.
En primer lugar voy a hablar del aparato en sí y de su uso. Olvidad todas las tonterías que habéis visto en la TV o en las películas, poco a poco os iréis dando cuenta de que lo que nos intentan vender no es más que un cúmulo de mentiras.
Existen dos tipos de polígrafos: el analógico (unas varillas que oscilan y van marcando sobre un papel una gráfica), de tiempos de Eliot Ness, y el digital (dispositivo unido a un ordenador que calcula con gran precisión), que es el que se debería usar actualmente. La próxima vez que veáis a un individuo con un polígrafo analógico pensad en cómo ha evolucionado la ciencia desde los años 20-30 y que ese individuo nos quiere hacer creer que su funcionamiento es perfecto. Estos polígrafos presentaban mil fallos: a veces el papel no corría bien (y alteraba la gráfica), la tinta se secaba y no dejaba oscilar sin rozamiento las varillas (y alteraba la gráfica), las varillas saltaban... Y eso olvidando que los datos son difíciles de interpretar a ojo, ¡necesitando lupa y una buena calculadora para medirlo correctamente!
También existen tres tipos de experto:
- El aficionado, que simplemente se ha comprado un polígrafo y ha leído las instrucciones.
- El poligrafista técnico, que ha realizado un cursillo de fin de semana de 200-300 horas. Suelen ser el grueso e interpretan muy erróneamente las variables fisiológicas, lógico pues muchos no tienen otros estudios.
- El psicofisiólogo, médicos y/o psicólogos de carrera que usan el polígrafo sabiendo perfectamente qué miden y cómo representarlo.
En la televisión solemos encontrar a los 2 primeros...
¿Cómo se usa?
Ahora es cuando vais a empezar a daros cuenta de la poca idea que tienen algunos...
Aún no he visto programa televisivo en el que el polígrafo se use correctamente.
Cito los elementos y su uso correcto:
- Silla. Una silla cómoda, con reposabrazos y una almohadilla especial bajo el ocupante que se encargará de medir si se mueve o si contrae el esfínter para tratar de nublar nuestra gráfica. Es tan sensible que se pueden observar los latidos del corazón en sus registros, incluso si traga saliva el indiciduo.
- Manguito. Se coloca en el biceps y sirve para medir la presión sanguínea (incluso algunos miden también las pulsaciones) y se coloca directamente sobre la piel en el brazo izquierdo, pues es el más cercano al corazón y el que da una información más veraz. Es bastante molestos y, debido a que mantiene una presión constante, no puede ser llevado más de 10 minutos porque empieza a doler bastante.
- Medidores de conductividad. Son 2 especie de ventosas que se adhieren directamente a la piel de un antebrazo o los dedos de una mano y que sirven para medir lo bien que conduce la piel la electricidad. Se basa en que al mentir el individuo suda y, por ello, transmite mejor la electricidad. Ni es molesto ni da descargas, como muchos creen.
- 2 fuelles. Son unos fuelles que rodean nuestro cuerpo, uno a la altura del pecho y otro a la altura del vientre. Su finalidad es medir nuestro ritmo respiratorio. Van bajo la camisa o sobre ella en el caso de que se lleve ropa fina y deformable, sin corbatas ni similares. Yo en TV los he visto puestos sobre corbatas, sobre americanas...
- Manguito de muñeca. Sirve para medir las pulsaciones, ya en desuso pues el mismo que mide la presión suele dar esta información también.
Estos dispositivos están unidos a un ordenador que va representando en una gráfica cómo varían estas constantes e informando de si alguna se dispara o no.
¿Cómo se interpretan los datos?
Los datos se interpretan contrastándolos con los que presenta un individuo “tranquilo”. Generalmente se buscan paradas de la tasa cardíaca seguidas de una aceleración (que puede ser menor a un segundo), paradas de respiración al escuchar la pregunta y antes de responder, contracciones de esfínter prolongadas al escuchar la pregunta, sudoración...
El ordenador representa los datos y hace las operaciones que antes se hacían a mano y nos da un resultado. Esta información nos dice que el individuo miente o no y con qué probabilidad, según nuestro método, nuestra conclusión es válida. Por ej: Miente con un 98% de fiabilidad.
Generalmente los datos han de tener más de un 95% de fiabilidad, si no es así se considera que ni el especialista ni el aparato tienen seguridad para decir una cosa u otra. Esta fiabilidad se extrae según los criterios sobre los que se basa el aparato.
Pero ahora que nadie piense que “todo lo hace el aparato” pues es el experto el que tiene que calibrarlo de acuerdo a cada persona y evaluar si el ordenador ha pasado por alto algo, que a veces pasa.
¿Cómo se realiza un interrogatorio?
Que no os engañen, los americanos son buenos en esto... pero porque copian a europeos y, sobre todo a japoneses. Ahora definitivamente vais a ver que los programas de TV son una completa farsa.
Lo más básico es fundamental: habitación pequeña, sin adornos, con mesa para el especialista y silla para el que va a ser poligrafeado. El resto sobra, ni nada ni nadie, sólo una cámara que grabe para que quede constancia. El especialista se sienta tras el que va a ser sometido a examen, para que éste no tenga contacto visual con el experto. Todo esto porque es fundamental que el sospechoso no tenga ninguna distracción o presión de ningún tipo.
Las cuestiones planteadas han de ser directas, dicotómicas (respuesta sí o no), difíciles de eludir (muy exactas) y breves (nada de si, el día que se casó Enriquito Iglesias, vio a Maritrini esconderse en el cuarto de baño con Periquín a las 3 am). Se presentan en tandas de unas 7-10 con descansos entre ellas porque los manguitos molestan y se necesita que el individuo descanse, los interrogatorios de media hora y más de diez minutos son muy irreales porque, o el manguito se ha aflojado o el sujeto debería quejarse seriamente.
Antes de que se me olvide, preguntar acerca del futuro no tiene sentido, pues difícilmente elicitará una respuesta biológica.
Hay muchos tipos de interrogatorio pero todos se basan en la presentación de preguntas sencillas intercalando preguntas clave. Por ej:
- Se llama usted X? (sirve para ver las variables sin que haya excitación)
- Tiene X años? (preguntas que pueden ser o no ciertas pero que no tienen relevancia, para que se estabilice y medir sus variables sin excitación)
- Robó usted la caja fuerte de la empresa X? (ahora, cuando está estable y más tranquilo es cuando le lanzamos el golpe)
Tras esto volvemos a las preguntas “tontas”, para que se estabilice y después volvemos a la carga. Éste es el sistema más típico y usado, pero hay miles. Uno muy interesante es el desarrollado por japoneses, imaginad para el ejemplo que el sospechoso robó un coche rojo. En este caso el individuo no contesta, simplemente escucha.
- Robo usted el coche...
- Blanco?
- Negro?
- Azul?
- Rojo?
- Verde?
Se espera que al llegar a rojo las variables sufran una variación que lo delate.
Problemas.
Suponiendo que lo que mide el polígrafo nos informa acerca de la presencia de engaño (que yo no lo veo tan claro como algunos), hay una serie de factores que permiten “engañar” al polígrafo y, por el contrario de lo que muchos piensan, el entrenamiento no siempre es necesario. Con un adiestramiento muchos podrían eludir un polígrafo, hay mil técnicas para falsear los datos o para relajarse, pero hay personas que lo engañan sin problemas. Son los mentirosos natos o los mentirosos enfermos, que creen que sus mentiras son ciertas. Esta gente es capaz de mentir sin pestañear, están tan acostumbrados que no les perturba.
Otro problema, y el más conocido por el polígrafo, es que acusa a las personas que se ponen nerviosas de manera “sospechosa”. Por ejemplo, imaginemos que nos preguntan acerca de cómo asesinaron a un amigo nuestro delante de nosotros y nos insinúan que realmente fuimos los ejecutores. Simplemente por el recuerdo de una experiencia tan traumática el polígrafo se dispararía. Es por esto que el polígrafo culpa más que libra, por lo que muchos inocentes se han visto bajo sospecha tras una sesión.
Imaginaos tranquilos siendo acusados de triple homicidio, con esos incómodos dispositivos puestos en vuestro cuerpo y la mirada de un experto clavada en vuestra nuca... ¿fácil verdad?
Espero que haya servido para romper algunos mitos, y recordad que es una breve introducción. El que tenga alguna pregunta específica que la haga, a ver si puedo responderle. 1 saludo!