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El porqué de estas situaciones la he explicado a lo largo y ancho de muchos hilos, y no es otra que el ABUSO que se hace de los recursos sanitarios; y como sale gratis, pues es mejor que una ambulancia se desplace a un domicilio que el paciente se vaya a su centro de salud o al hospital por medios propios, es gratis. Y solo eso, sino que el abuso está en que se avisa a una ambulancia porque a la abuela la ven un poco rara o porque al muchacho le duele la cabeza después de una noche de juerga. Y se acude a tomar un tensión y poco más en muchos de los casos que se acude a domicilio. Y claro, no es lo mismo que estar en la calle. A un domicilio tienes que subir todo el equipo, en la calle no, en un domicilio tardas más en hacer una historia clínica, en la calle no, en un domicilio se tarda más tiempo en hacer las cosas, en la calle no, en un domicilio tienes menos espacio para trabajar, en la calle no. Todo esto junto con otras pegas hace que los servicios se retrasen, y si para colmo sumamos que no hay recursos suficientes, pues.... el último que cierre la puerta.
Pero no es cuestión tampoco de que haya más o menos recursos, es cuestión de hacer un uso lógico de ellos, y enviar una ambulancia donde haga falta, no donde lo pidan por pedir.
Desde que las ambulancias acuden a domicilios para urgencias (NO EMERGENCIAS) se jodió el invento y el sistema va de mal en peor, porque así que pongas más recursos más se abusará de él, porque la gente verá que ya no se tarda una hora en que acuda la ambulancia, sino cinco minutos, y claro, se está mejor en casa con las pantunflas puestas y que venga el médico a mi casa a verme la garganta que para eso pago con mis impuestos la Seguridad Social.
Y con el SAMUR ocurrirá lo mismo. Asumirán los domicilios y no se bajarán de los ascensores durante muchas guardias. Y el ayuntamiento pensará que faltarán recursos y pondrá más ambulancias, y seguiran acudiendo a domicilios como alma que lleva el diablo.... y seguirá habiendo retrasos con la única diferencia que en vez de que hayan cincuenta unidades circulando, sean setenta, perolas setenta ocupadas en lo mismo. Es el cuento de nunca acabar.