El juez que instruye el caso del robo de las cuatro toneladas de marihuana en Valencia ordenó ayer el ingreso en prisión de dos hombres detenidos en la operación antidroga. La Guardia Civil continúa las investigaciones para arrestar a todas las personas implicadas en la sustracción del alijo de droga.
Además de un inspector de la Policía Portuaria, los agentes del Equipo Contra la Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) detuvieron a otros dos hombres y una mujer. El funcionario del Ministerio de Fomento fue uno de los imputados que el juez envió a la cárcel tras valorar las pruebas obtenidas por los investigadores de la Guardia Civil.
Como ya informó en su edición de ayer LAS PROVINCIAS, el policía portuario participó en las labores de custodia del alijo de marihuana. El inspector se acogió a su derecho de no declarar ante la Guardia Civil, pero contestó ayer por la mañana a las preguntas que le formuló el juez.
La droga sustraída formaba parte de un alijo de 6.500 kilos de marihuana que fue intervenido el pasado 10 de enero en una operación de la Agencia Tributaria. Una banda organizada, según las investigaciones, perpetró el robo en la madrugada del 9 de febrero en un almacén policial del puerto de Valencia donde no había cámaras de vigilancia.
Pero la cámara de un barco atracado en las inmediaciones grabó una furgoneta sospechosa en la puerta del almacén. El análisis de estas imágenes fue una de las pistas que siguieron los agentes antidroga. El policía encarcelado, que trabajaba en el puerto la noche que desapareció la marihuana, negó su implicación en el robo durante su declaración ante el juez. También aseveró que no conoce a los otros tres detenidos en la operación. Todos están acusados de un delito contra la salud pública