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Investigan el hallazgo de un cuerpo carbonizado en un incendio forestal
Es un hombre de complexión fuerte, pero su estado impidió que ayer pudiera ser identificado
Los equipos de extinción encontraron el cadáver, todavía en llamas, cuando apagaban un fuego en Gondomar
Autor:
Alejandro Martínez Laura Míguez
Fecha de publicación:
15/9/2009
Un hombre de complexión fuerte apareció ayer carbonizado en un monte del municipio pontevedrés de Gondomar. Lo encontraron agentes forestales cuando acudieron a apagar un incendio que se declaró en la zona. Por el momento es un misterio la causa de este trágico suceso. Al cierre de esta edición, los agentes de la investigación que llevan el caso no habían logrado identificar el cadáver, que se encontraba completamente quemado.
El cuerpo apareció entre unos árboles a unos cincuenta metros de la carretera secundaria que une la parroquia de Couso con el municipio de Gondomar, al lado de un sendero forestal que los bomberos utilizaron para acceder a la zona del incendio.
Vecinos del barrio cercano de As Rasas dieron la voz de alarma a las tres y media de la tarde al detectar las llamas. Acudió una patrulla de agentes forestales para apagar el incendio, que no parecía complicado. Ardieron unos 2.000 metros de superficie forestal. Poco después de introducirse en el monte, los agentes hallaron el cadáver, que todavía se encontraba en llamas, según indicaron fuentes cercanas al caso. Inmediatamente solicitaron más refuerzos. Bomberos de Tomiño, policías locales y guardias civiles se presentaron en el lugar. No había nada que hacer. El cuerpo estaba completamente carbonizado. La víctima murió sin poder pedir auxilio a nadie. Su cuerpo apareció boca abajo con las piernas aparentemente desintegradas por el fuego y con los brazos extendidos hacia arriba.
Una médico forense acudió para certificar la muerte, pero hubo que esperar hasta que llegase el juez para proceder al levantamiento del cadáver, lo que no se produjo hasta las nueve y cuarto de la noche.
Zona acordonada
La Policía Local acordonó la zona y cortó el acceso a la pista forestal. Solo abrió el paso para la entrada del coche fúnebre que trasladó el cadáver hasta el Hospital Nicolás Peña, de Pontevedra, donde será analizado.
Guardias civiles especializados del Seprona también se presentaron en esta zona del monte comunal para recoger pruebas e indicios que ayuden a esclarecer este hecho.
Las sospechas iniciales apuntan a que la víctima sea un vecino del entorno. La prueba que conduce a esta hipótesis es que no ha aparecido ningún vehículo aparcado en las inmediaciones, por lo que se cree que el hombre pudo haber llegado a pie hasta el lugar en el que fue sorprendido por las llamas.
A última hora de la tarde de ayer no se había presentado ninguna denuncia por desaparición que pueda relacionarse con este caso