La reforma de la Ley de Tráfico obligará a llevar casco a los ciclistas de menos de 18 años y a los peatones que infrijan las normas a someterse a pruebas de alcoholemia y drogas
El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, ha presentado tras el Consejo de Ministros el anteproyecto de reforma de la Ley de Tráfico y Seguridad Vial, que espera que entre el vigor «a principios del próximo año». Y que entiende como el paso previo a la reforma del Reglamento General de Circulación. «Sienta las bases de una reforma general que terminará por reformar cuestiones más concretas», ha afirmado el ministro.
El proyecto se basa en tres campos de actuación: la mejora de la seguridad vial, la necesidad de comunicar las zonas viales donde hay obras y la cooperación institucional en materia de tráfico.
El ministro ha confirmado el uso del casco para ciclistas en vía urbana «para menores de 18 años», como ya adelantó ABC. «Soy consciente del debate social y político que ha levantado esta cuestión, por ello se ha creado una subcomisión parlamentaria y la voluntad del Gobierno es que cualquier acuerdo consensuado al que se llegue pueda ser añadido como enmienda al proyecto final de la ley», ha apostillado Fernández Díaz.
También se ha referido a los sistemas de retención infantil, donde este anteproyecto «sienta las bases orientativas sobre cómo será la definitiva regulación en este aspecto». Por lo que ha avanzado que se pasa a un «sistema de tallas».
Casco para ciclistas en ciudad
Respecto a la conducción con presencia de drogas en el organismo, el ministro ha sido tajante al explicar que habrá «tolerancia cero» con este tipo de sustancias. «Hemos vivido en una situación alegal en este aspecto y es el momento de regularlo», ha sentenciado. A partir de ahora será «obligatorio» someterse a las pruebas de detección de sustancias. Como novedad, se incluye a lo peatones: «Si un peatón comete una infracción, tendrá que realizar la prueba igualmente». Para las drogas, la prueba habitual será «la saliva, y un segundo análisis de sangre si fuese pertinente».
Por otro lado, las multas por conducir bajo los efectos del alcohol se duplican y pasarán «de 500 a 1.000 euros», mientras que para los casos de infracción por consumo de drogas «se impondrá una sanción de 1.000 euros».
El nuevo proyecto legislativo prohíbe el uso de detectores de radar, que conllevarán una multa de 200 euros y la retirada de tres puntos. Asimismo, el ministro ha señalado que se mantiene la prohibición sobre los inhibidores de radares.
http://www.abc.es/sociedad/20130726/abc ... 61425.html