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Las inundaciones pueden desencadenar diarrea, malaria, dengue o meningitis

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Meteorológica Mundial (OMM) han presentado el Atlas del Clima y la Salud, un documento en el que alertan de que la variabilidad climática y la presencia de fenómenos extremos como las inundaciones pueden desencadenar epidemias de varias enfermedades, tales como diarrea, malaria, dengue o meningitis.

En dicho informe, presentado este miércoles, se muestra como paralelamente al cambio climático que sufre el mundo están aumentando los peligros para la salud humana. Prueba de ello las sequías, inundaciones y ciclones que están afectando ya a la salud de millones de personas cada año.

"El clima tiene una profunda influencia en la vida y la supervivencia de la gente, y los servicios climáticos pueden tener un profundo impacto en la calidad de esas vidas, en parte como consecuencia de unos mejores resultados sanitarios", según ha explicado Margaret Chan, directora general de la OMS.

Por ello, la secretaria general de la OMM, Michel Jarraud, ha apuntado a la necesidad de reforzar la cooperación entre los profesionales de la meteorología y de la salud, "fundamental para garantizar la incorporación de información actualizada, precisa y pertinente sobre el tiempo y el clima en la gestión de la salud pública a nivel internacional, nacional y local".

De hecho, el Atlas muestra como la colaboración entre los servicios meteorológicos, de emergencias y de salud está ya salvando vidas. Por ejemplo, el número de muertos por ciclones de similar intensidad en Bangladesh se redujo de alrededor de 500.000 en 1970, pasando por 140.000 en 1991, a 3.000 en 2007, gracias sobre todo a las mejoras introducidas en los sistemas de alerta temprana y preparación.

Pese a ello, el tiempo y el clima hace que muchas enfermedades infecciosas, como la malaria, el dengue o la meningitis, multipliquen su incidencia entre una estación y otra.

Además, el informe alerta de que las olas de calor que normalmente se registran solo una vez cada 20 años podrían sucederse como promedio cada 2 a 5 años a mediados del presente siglo.
MÁS PERSONAS EN RIESGO DE GOLPES DE CALOR

Al mismo tiempo, el número de personas mayores que viven en ciudades (uno de los grupos más vulnerables a los golpes de calor) se casi cuadruplicará a nivel mundial, pasando de 380 millones en 2010 a 1.400 millones en 2050, de ahí que la cooperación entre los servicios climáticos y de salud deba activar "medidas orientadas a proteger mejor a la población durante los fenómenos meteorológicos extremos".

El Atlas muestra también que los servicios meteorológicos y de salud pueden colaborar para vigilar la contaminación del aire y sus efectos en la salud, y apunta a que la adopción de nuevas fuentes de energía doméstica más limpias tendrá el doble efecto de mitigar el cambio climático y salvar la vida de aproximadamente 680.000 niños cada año gracias a la menor contaminación del aire.

No obstante, advierten de que la relación entre la salud y el clima depende de otras vulnerabilidades, como por ejemplo las creadas por la pobreza, el deterioro del medio y una infraestructura deficiente, especialmente en materia de agua y saneamiento.

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España se prepara para la llegada de nieve y más frío

Las temperaturas nocturnas descenderán ligeramente este lunes en una jornada en la que se espera que catorce provincias estén en alerta por nieve, según la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología.

Así se activará la alerta amarilla (riesgo) por nieve en Huesca, Teruel, Zaragoza, Cantabria, Burgos, León, Palencia, Lérida, Navarra, La Rioja, Álava, Vizcaya, Guipúzcoa, Asturias.

Los cielos estarán nubosos o muy nubosos en el extremo norte peninsular, alto del Ebro y el entorno de los sistemas central e ibérico, con precipitaciones débiles o moderadas que serán más intensas en el Cantábrico oriental y norte de Navarra, donde pueden ser persistentes y localmente fuertes. Habrá intervalos nubosos en el resto de la Península, salvo en Extremadura, Andalucía y extremo sureste, donde estará poco nuboso. Baleares y Melilla sufrirán intervalos nubosos con algunos chubascos débiles o moderados que pueden ir acompañados de tormenta. Canarias se mantendrá nuboso en el norte de las islas y poco nuboso en el sur.

En cuanto a las temperaturas, las diurnas estarán en ligero o moderado descenso en Baleares y Canarias, y con pocos cambios en la Península. Las nocturnas sufrirán un moderado descenso en el cuadrante suroeste peninsular y habrá heladas en general débiles en zonas del centro y norte de la Península.

Además la cota de nieve se situará entre los 400 y 700 metros en el extremo norte peninsular, y entre los 800 y 900 metros en el centro y en Baleares.

Por último, soplarán vientos flojos a moderados del componente noroeste en la Península y Baleares, que podrán ser fuertes en el Cantábrico oriental, Valle del Ebro, Ampurdán y Melilla. En Canarias, soplarán vientos moderados a fuertes del componente noreste. Se activará la alerta amarilla por viento en Teruel, Zaragoza, Tarragona y Castellón y por fenómenos costeros en Cantabria, Gerona, Tarragona, La Coruña, Lugo, Pontevedra, Asturias, El Hierro, Fuerteventura, Lanzarote y La Palma.