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![](/publi/articulos/2010/09/2-policia869.jpg) Fabricado en piel de vacuno |
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En mis tiempos de pepinillo también les llamábamos "polisáurios", caimanes era y seguramente sea actualmente también más de la G.C.
Está claro, y lo ves después cuando ya otros te llaman caimán, que este cuerpo se sustenta con los 2, 3, ó 4 primeros años del policía. Después te das cuenta de lo que es esto y cambias de actitud en el trabajo. No con esto quiero decir que pasas de todo, pero mides más tu respuesta, vas relegando a un segundo lugar tu actividad profesional y vuelve tu actividad personal a un primer lugar (tu vida privada). ¿Porqué? Buena pregunta, yo también me la hacía hace años y soy de los que entró por vocación teniendo un empleo a lado de mi casa, lo dejé, me desarraigué de mi entorno y familia para trasladarme a donde me tocó, a más 700 km., muy felizmente porque hacía lo que quería y me gustaba. Al final, y con esto no quiero desilusionar a nadie, te das cuenta que lo que realmente vale la pena es tu vida personal y el trabajo, es eso, trabajo.
Podría contaros un montón de casos en los que justificaría lo arriba expuesto, pero se alargaría el post demasiado.
Eso si, disfrutad del Cuerpo esos primeros años porque yo lo hice y tengo unos recuerdos inolvidables, pese a que el "Cuerpo" se sustentará y se aprovechará de ese entusiasmo, vocación y celo profesional del novato.
Saludos de un polisáurio.