En el dia de hoy no murio ningun compañero a manos de la banda terrorista E.T.A
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Actualizado domingo 10/09/2006 09:53 (CET)
LUIS F. DURÁN / PABLO HERRAIZ
MADRID.- Cerca de 20 agentes de la Policía Municipal de Madrid fueron atacados el pasado viernes de madrugada en la Plaza del Dos de Mayo, en el barrio de Malasaña, cuando trataban de detener a varios skin-reds que acababan de agredir a un hombre de raza negra, según informa EL MUNDO citando fuentes policiales. Varios de los jóvenes lanzaron piedras, botellas y agredieron a los agentes. En la batalla campal la policía se vio obligada a efectuar cuatro disparos al aire ante la agresividad de los skins, que destrozaron dos coches.
Finalmente, la trifulca se saldó con seis policías heridos leves y tres detenidos, dos españoles y un rumano. Los agentes acudieron por su propio pie a una clínica. Sólo uno de ellos permanecía de baja ayer.
No es la primera vez que los agentes son atacados en esta plaza del barrio de Malasaña. En ese enclave los agentes mantienen un dispositivo especial para vigilar el botellón y la hora de cierre de los bares. Siempre que llaman la atención a los jóvenes se enfrentan a problemas. Muchas de las intervenciones acaban con insultos. En otras ocasiones terminan con pedradas o ataques que provocan daños en coches patrulla.
Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado viernes. Sobre las 2.30 horas, entró una llamada en la emisora del 091 que delataba una agresión en la plaza del Dos de Mayo. Hasta la zona se desplazaron dos coches patrulla que se encontraron a cinco o seis personas que perseguían a un joven negro, mientras gritaban "te vamos a matar negro de mierda". Al intervenir fueron atacados por más de 100 personas que hacían botellón. Pidieron refuerzos y dispararon al aire para disuadir a los agresores. Acudieron 10 coches patrulla a la plaza para enfrentarse a los atacantes.
Durante los disturbios se vieron palos, bates, barras de hierro y una cadena, con la que amenazaron a uno de los agentes. La pelea se desató cuando los agentes detuvieron a uno de los que persiguió y agredió al chico negro. Los policías conducían al detenido hacia su coche, pero los jóvenes de la plaza comenzaron a lanzar piedras, botellas y hasta una papelera. Tras disparar al aire uno de los policías, la gente se dispersó y hubo carreras por las calles de Malasaña.
Los agentes de Policía Municipal consiguieron detener a uno de los jóvenes que tres les agredió y a otro, al que después pillaron destrozando un coche patrulla con una barra de hierro. Las tres personas que fueron trasladadas a dependencias policiales acusadas de agresión, resistencia a la autoridad y desórdenes públicos.
En la misma plaza del Dos de Mayo quedaron dos coches patrullas dañados. Tenían las lunas rotas y golpes en la chapa. Del total de 20 agentes, seis acudieron a una clínica que tiene concertada la mutua de la Policía Municipal para que les hicieran un reconocimiento.Varios recibieron patadas en la cabeza y la espalda cuando estaban en el suelo. Sólo uno de ellos ha recibido la baja médica. Esa noche, 11 policías trabajaban en Centro. El resto pertenecía a otros distritos o unidades, y acudió allí en apoyo a la petición de refuerzos.
Hechos similares
En diciembre de 2004 también se produjo un hecho similar en la misma zona. Dos agentes inspeccionaban un bar cuando varios jóvenes lanzaron objetos contra su coche patrulla aparcado en la calle de Valverde. Uno de los dos policías salió a la calle y le pidió la documentación al joven. La contestación del chico fue: "¡Hijo de ....! ¡Yo no tengo que enseñarte nada! ¡Sois unos fascistas de mierda!". Entonces, unos 15 ó 20 jóvenes más, que estaban en la plaza del Dos de Mayo, se fueron a por el agente. Su compañero tuvo el tiempo justo de pedir refuerzos por la radio que llevaba.Salió a la calle para ayudar a su compañero, pero la pelea ya comenzaba. Los agresores también eran skin-reds.
También uno de los agentes acabó sacando su pistola y pegó dos tiros al aire para intimidar a los agresores. Asimismo, el 24 de octubre de 2004, varios jóvenes que estaban haciendo botellón destrozaron un coche patrulla de la Policía Municipal, también en la plaza del Dos de Mayo. El vehículo acabó con las lunas trasera y delantera rotas por el lanzamiento de piedras y adoquines. Tenía numerosos desperfectos en la carrocería, ya que los jóvenes lanzaron cubos de basura y otros objetos contra el coche. Los disturbios se saldaron con un detenido.
Los atacantes dañaron el vehículo aprovechando la ausencia de los agentes, que abandonaron el lugar a la carrera para tratar de arrestar a un joven que les había lanzado una litrona.
Los policías que fueron golpeados forman parte del dispositivo del Ayuntamiento para controlar el botellón. La ley seca, que prohíbe beber en la calle o comprar alcohol a partir de las 22.00 horas, se vio incumplida este verano. Con la llegada del buen tiempo, miles de personas toman la plaza del Dos de Mayo y sus alrededores para regar la diversión al aire libre con alcohol.
El Ayuntamiento reforzó entonces la vigilancia al incrementar el número de agentes dedicados a controlar el cumplimiento de la ley. Sin embargo, últimamente los jóvenes se les han rebelado.Sobre todo cuando los infractores son skins.
Críticas
El portavoz adjunto del PSOE en el Ayuntamiento, Óscar Iglesias, denunció la situación vivida en Malasaña: "Es duro y una vergüenza que Gallardón permita que existan zonas de la ciudad donde la policía no pueda garantizar su integridad física porque sufre agresiones, destrozan sus coches patrullas y, en ocasiones, para evitar linchamientos tiene que disparar al aire. La Policía Municipal está abandonada y mal dirigida, hace aguas y aguanta por la profesionalidad de los policías".
Además, el concejal del PSOE denunció que "la noche en que ocurrieron los hechos, de los 52 componentes actuales del turno de noche en Centro, sólo estaban trabajando 11. Es un ejemplo claro de la mala planificación y organización de un cuerpo que tiene el mayor número de policías de su historia", explicó Iglesias.
Para concluir, el portavoz socialista dijo: "De nuevo tenemos que denunciar la falta de medios y la indefensión de los policías que se dirigen a realizar dichos servicios comprometiendo su integridad física e incluso su vida al tener que hacer uso de su arma. Esto es fruto del modelo clientelar que ha establecido el PP en la cúpula de mando, donde prima el amiguismo por encima de la profesionalidad
