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wam escribió:Que significa?

Al menos tres de los detenidos por la Policía en la operación del martes contra la Mesa Nacional de Batasuna forman parte de un nuevo elemento de ETA denominado Bateragune, que constituye, en realidad, el máximo órgano de dirección de la izquierda abertzale y que ha sido configurado a imagen y semejanza de Ekin y Kas -los guardianes de la ortodoxia de la banda-. Según las Fuerzas de Seguridad, los veteranos Arnaldo Otegi, el ex secretario general de LAB Rafael Díez Usabiaga y Rufi Etxeberria estarían realmente bajo su autoridad debido a que es la dirección de ETA la que los designa.

Inicialmente los investigadores habían llegado a la conclusión de que Bateragune era el nombre con el que había sido bautizada la nueva Mesa Nacional, pero lo cierto es que se trataría de un órgano más amplio que tiene representantes en ese embrión que estaba intentando desarrollar Otegi bajo, según la Policía, las directrices y la estrategia de la organización. Los miembros de ese órgano de dirección serían Miren Zabaleta, Sonia Jacinto, ex tesorera del PCTV, y Arkaitz Rodríguez. Los tres notoriamente más jóvenes que quienes han estado oficiando durante años como dirigentes de Batasuna.

No es la primera vez que Otegi deja que una especie de comisario político de la banda marque sus pasos. Le ocurrió lo mismo durante el último proceso de negociación. El ex portavoz de Batasuna acudía a las reuniones de la mesa política de Loyola, pero quien hacía la función de correo de ETA y cuidaba de que sus consignas se cumpliesen era Unai Fano, miembro de Ekin, etarra de tercera generación, que fue detenido después portando material para la fabricación de bombas.

Además de la documentación incautada y la constatación de que los detenidos llevaban meses reuniéndose en diversas sedes del sindicato LAB para revitalizar la función política de la formación ilegalizada, los agentes han aportado como prueba ante el juez varios documentos entre los que se encuentra el titulado Estrategia independentista -publicado por este periódico- que le fue incautado al dirigente Ekaitz Sirvent.

Gc Edicion 175 Aniversario

gafaspolicia.com

Juanete escribió:Ahora la pregunta será ¿en cuanto tiempo estará este "hombre de paz" en la calle?. Ojalá y que me equivoque y pase el resto de sus días entre rejas, pero mucho me temo que no será así. Veremos a ver que pasa.

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Silvio Dante escribió:En mi caso, la alegría por las detenciones de estos terroristas se ha visto contrarrestada con una preocupación general y es que esta sociedad parece estar enferma y agonizando. Lo digo porque en el entorno progre, supuestamente antiterrorista, se están llevando las manos a la cabeza por estas detenciones, incluso cierto partido que gobernó durante lustros y lustros en Euskadi ahora se va a manifestar en contra del golpe a Batasuna a sabiendas de que no se les va a castigar socialmente por ello.

Es triste ver cómo ha calado el mensaje de que "hay un sector pacifista de la izquierda abertzale" o "Otegi es un hombre de paz".

Submarino escribió:Esta fotografía se puso en este post viewtopic.php?f=15&t=41388&start=30, y ahora ya sabemos todos quienes son y cual era su función en esa rueda de prensa.

Arkaitz Rodriguez a la derecha de Otegui y Miren Zabaleta a su izquierda.

Mira que eres mal pensado...

Se ve sin ninguna duda que son un grupo de "muy pero que muy amables ciudadanos" ejerciendo el derecho de libre asociación (y subvencionado) que les da la Constitución que no reconocen del "Estado Español" al que dicen no pertenecer...

DEPOL Guardia Civil

Inicio curso: septiembre 2019

de-pol.es

Arnaldo Otegi lideraba el nuevo proyecto político de ETA, que se iba a presentar en sociedad la próxima semana, y en el que la banda terrorista ordenó «marginar» al PNV en beneficio de Eusko Alkartasuna (EA). En ese proceso –«dirigido por ETA desde el comienzo hasta el final»– uno de los objetivos prioritarios que le había marcado la organización criminal al ex portavoz de la ilegalizada Batasuna era poner sobre la mesa «treguas encubiertas» en el País Vasco y Navarra, valiéndose de «engaños y enredos», para facilitar la formación de ese frente soberanista. Su condición de responsable de esta «comisión de coordinación» que buscaba reflotar Batasuna, denominada «Bateragune», es el principal motivo por el que Otegi –apodado «Ronaldinho» por sus compañeros– duerme desde ayer de nuevo en la cárcel. Pasadas las cinco y media de la tarde, el juez de la Audiencia Nacional ordenaba, a instancias de la Fiscalía, su ingreso en prisión y el del ex secretario general del sindicato LAB, Rafael Díez Usabiaga. El mismo camino siguieron otros tres dirigentes batasunos, empeñados en reflotar la formación ilegalizada por encargo de ETA: Sonia Jacinto, ex tesorera del PCTV; Miren Zabaleta, hija del coordinador de Aralar, Patxi Zabaleta; y Arkaitz Rodríguez, ex responsable de Haika en Álava. Además, el histórico ex dirigente de la «mesa nacional» Rufino Etxeberría (que salió de la cárcel hace poco más de un mes y según el juez no participó en las reuniones para refundar Batasuna) y Ainara Oiz, otra de las detenidas, quedaron en libertad sin cargos mientras que Amaia Esnal, José Manuel Serra y José Luis Moreno Sagües deben pagar una fianza de 10.000 euros antes de cinco días si quieren evitar su ingreso en prisión.
En el auto de Garzón, de 55 folios, el magistrado constata que esta nueva «apuesta política» de ETA era la misma de siempre, pues buscaba superar «los obstáculos», no «mediante los votos, sino mediante las bombas». De hecho, Garzón recalca que, al menos desde el pasado abril, el «comité de coordinación» liderado por Otegi se había puesto manos a la obra para impulsar un proyecto «dirigido y controlado por ETA» que buscaba forzar la negociación y que una opción proetarra concurriera a las municipales.
A lo largo del verano, se especifica en un documento intervenido a Díez Usabiaga, y a resultas de los contactos mantenidos con los partidos del frente soberanista, «especialmente con Eusko Alkartasuna», sus integrantes elaboraron «una oferta para presentar a los agentes políticos y soberanistas en el otoño». Esa propuesta, según informaron a LA RAZÓN fuentes de la investigación, se pensaba exponer en un acto público el próximo día 25, con el posible apoyo de EA. Más adelante, en diciembre, se haría público un documento de apoyo firmado por diversas «personalidades», entre ellas un ex lendakari.
Dos viajes a Francia
Presentado ya ese bloque independentista, los terroristas fijaron la primavera de 2010 como fecha tope para la creación de este «nuevo referente político». Los planes de ETA pasaban por abordar una segunda etapa a partir del verano, marcada por la «divulgación masiva» de su propuesta independentista, en la que «se omite cualquier mención a la desaparición de la violencia terrorista».
El papel de Otegi era primordial. Para conseguir el respaldo de las fuerzas independentistas, debía ofrecer «treguas encubiertas» que dejaban a salvo de atentados al País Vasco y Navarra, «si bien la actividad violenta continúa en el resto de España». De hecho, ese «alto el fuego» ya se habría producido entre abril y junio de 2009, cuando no hubo atentado alguno en los territorios de lo que ETA considera «Euskal Herria».
La resolución judicial constata que Otegi y Usabiaga viajaron juntos a la localidad francesa de Ezpélete el pasado 30 de abril para reunirse con Jokin Echebarria, ex jefe del «aparato político internacional» de ETA. Otegi se desplazaría en una segunda ocasión al País vecino en junio, pese a que tenía prohibido salir de territorio nacional por la Audiencia Nacional.
En uno de los documentos intervenidos por la Policía, ETA evalúa «muy negativamente» el respaldo de la izquierda abertzale a la candidatura de Iniciativa Internacionalista en las pasadas elecciones europeas, una elección ante la que la organización admite estar «preocupada». «¿Dónde se toman las decisiones? ¿Hay alguien desarrollando la línea fuera de la dirección?», preguntan con evidente malestar los terroristas.
En otro documento, ETA alecciona a la nueva Batasuna sobre cómo debe proceder con el PNV, al que deben «disputar y quitar tanto la hegemonía en el ámbito abertzale como el estatus de primer interlocutor del Estado».

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Con Arnaldo Otegi encarcelado desde el pasado día 17 por intentar reconstruir Batasuna, la nueva petición de prisión para el ex portavoz de la formación ilegal, instada ayer por la Fiscalía, puede parecer una redundancia jurídica. Pero para Otegi quizá tenga consecuencias en el futuro. El Ministerio Público solicitó ayer a la sección segunda de la Sala de lo Penal que acuerde su ingreso en prisión en el marco del sumario en el que Baltasar Garzón investigó la supuesta financiación de ETA a través de las «herriko tabernas», en el que Otegi está procesado junto a otros 40 dirigentes batasunos. ¿El motivo? Otegi estaba en esta causa en libertad bajo fianza y, entre otras medidas cautelares, tenía prohibido salir de España sin autorización de la Audiencia Nacional. Algo que, argumenta la Fiscalía, hizo al menos en dos ocasiones al trasladarse a Francia para reunirse, presumiblemente, con dirigentes de ETA. Esa vulneración de la prohibición de abandonar España sin permiso, entiende la Fiscalía de la Audiencia Nacional –que dirige Javier Zaragoza–, es suficiente para ordenar su ingreso en prisión en el marco de este sumario, actualmente pendiente de juicio.



Si la Sala accede finalmente a la petición fiscal, Otegi seguiría en prisión aunque la Audiencia Nacional le dejara en libertad bajo fianza por el motivo por el que en estos momentos cumple prisión provisional: sus intentos de reflotar la «mesa nacional» de Batasuna. «Su situación actual de prisión es muy coyuntural –explicaron fuentes jurídicas– y es probable que cuando la recurra ante la Sala le impongan una fianza, porque si le imputas su integración en ETA es el mismo delito por el que ya está procesado en el sumario de Batasuna».



La Audiencia ya denegó a Otegi el permiso para salir al extranjero en tres ocasiones, la última el pasado 11 de agosto.




Los pasos



- Otegi ingresó en prisión el pasado día 16 por intentar reflotar Batasuna.



- La Fiscalía pide ahora esa misma medida por incumplir la prohibición de salir de España en el marco de otro sumario en el que está procesado.



- Si la Sala le dejase en libertad bajo fianza, esta nueva orden de prisión impediría su excarcelación.