FORO POLICIA

EN DECLARACIONES A LA CADENA COPE

La familia Broseta advierte al asesino de su padre que no están obligados a perdonarlo

ESPAÑA. Las víctimas de ETA rechazan cualquier coacción social o moral que les lleve a tener que aceptar el supuesto perdón de los asesinos de la banda terrorista, tal y como ha contado a la Cadena Cope el hijo del profesor Broseta, asesinado por los etarras en 1992.

Juan Baño - 28-12-10


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Reflexión de la familia Broseta en boca de Manuel Broseta 1

"Las víctimas de ETA no tenemos ninguna obligación de perdonar". Es la respuesta de la familia del profesor Manuel Broseta, asesinado por ETA en 1992, a la voluntad que ha manifestado en prisión el etarra que ordenó aquel asesinato, Álvarez Santacristina, Txelis. El ex cabecilla de ETA ha comentado su deseo de pedir perdón personalmente a los allegados del catedrático valenciano. Este dato, desvelado por la COPE el pasado 17 de diciembre, es conocido por el ministerio del Interior.


Txelis, que, por su condición de arrepentido abandona a diario la cárcel de Nanclares para regresar a pernoctar cada noche, ha mostrado, además, su disposición a acudir a los colegios para ofrecer su textimonio contra la violencia. Manuel Broseta, hijo del asesinado, asegura que la familia no ha recibido hasta ahora ninguna comunicación directa del deseo de Txelis. Advierte, además, contra el peligro que corren ahora como victimas de ETA: "hay un peligro muy importante, que se produzca una coacción moral a las víctimas del terrorismo, es decir, que las víctimas nos sintamos en la obligación de dar el perdón a estos asesinos como una manera de facilitar algún tipo de proceso".


La familia Broseta, que ha meditado su respuesta, advierte que “Txelis es un asesino y nosotros (sus víctimas) estamos en un plano superior”. El arrepentimiento del criminal tiene que ser verificado. “No basta con firmar un papel y conseguir determinados beneficios penitenciarios”. Hay que recordar que la actual ley obliga a cumplir con ese protocolo para considerar a un etarra fuera del colectivo de ETA.


La respuesta de la familia Broseta no ha debido de sorprender a Txelis. El etarra ya comentó en prisión que no daba el paso de dirigirse al entorno de su victima porque entendía que podía ser rechazado.


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