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El Diario Vasco escribió:
El jefe del 'aparato militar' de ETA participó en el asesinato del gendarme

El jefe de los comandos de ETA Mikel Carrera Sarobe, alias 'Ata', y Arkaitz Aguirregabiria del Barrio han sido identificados como dos de los supuestos implicados en el asalto a una tienda de automóviles y en el asesinato de un policía francés el martes, según han informado fuentes de la lucha antiterrorista.

Carrera Sarobe, nacido en Pamplona el 30 de mayo de 1972, está considerado como uno de los principales dirigentes de ETA en la actualidad. Fue identificado en enero como el terrorista que alquiló con documentación falsa la furgoneta incautada por la Guardia Civil en Zamora cuando dos miembros de la banda transportaban a Portugal material electrónico para la confección de bombas.

'Ata', que huyó a Francia en el año 2003, según se cree, es sospechoso de haber formado parte de un comando de ETA que operaba en Navarra, aunque no existe ninguna acusación contra él de esa época. Desde 2004 forma parte del 'aparato militar' y ha estado vinculado a Garikoitz Aspiazu, 'Txeroki'.

Por su parte, Arkaitz Aguirregabieria está acusado en España de colocar un artefacto casero en la sede del Partido Socialista en Derio en 2005. En la actualidad desempeñaba funciones de adiestramiento de nuevos etarras en Francia. Nacido en Bilbao en 1983, fue detenido por la Ertzaintza el 30 de noviembre de 2005 acusado de haber puesto una bomba casera en la Casa del Pueblo de la localidad vizcaína de Derio. La bomba, que no llegó a estallar, fue colocada el 23 de junio de 2005 en el marco de una jornada de lucha convocada por la muerte de un etarra en un accidente de tráfico. El artefacto estaba formado por una botella de plástico que contenía cuatro litros de gasolina y medio kilo de azúcar, un petardo un aerosol y 1,7 gramos de pólvora con una mecha.

Tras aquel arresto, Arkaitz Aguirregabieria quedó en libertad, aunque encartado en un sumario de la Audiencia Nacional, pero cuando se iba a celebrar el juicio, en el que el fiscal le pedía cuatro años de cárcel y 14 años de inhabilitación, se dio a la fuga. La Audiencia Nacional dictó el 17 de enero de 2008 una orden de busca y captura.

Los últimos datos que se conocen sobre Aguirregabiria fueron proporcionados por el presunto 'liberado' de ETA Ibai Beobide Arza, miembro del 'comando Basakatu', detenido el pasado 13 de febrero por la Guardia Civil en Guipúzcoa. Beobide declaró tras su arresto que había recibido adiestramiento en Francia y que el instructor en materia de fabricación de artefactos y de informática había sido Arkaitz Aguirregabiria.

Francia pide la colaboración ciudadana

Las autoridades francesas difundirán hoy fotografías de presuntos miembros de ETA y un vídeo en el que se ve a cinco de ellos en un supermercado de la localidad donde un comando de la organización terrorista mató al policía francés.
Con esta medida se pretende hacer un llamamiento a la población para que proporcione pistas que puedan conducir a la detención de los terroristas que robaron varios vehículos en un concesionario de Dammery-les-Lys (a unos 60 kilómetros al sureste de París) y que mataron poco después al agente Jean-Serge Nérin en un control.

El único detenido hasta ahora, identificado como Joseba Fernández Aspurz, alias 'El Guindi', está buscado en España por actos relacionados con violencia callejera, y permanece en dependencias de la Subdirección Antiterrorista (SDAT) en Levallois-Perret, al noroeste de París.

Fernández Aspurz seguirá custodiado por la SDAT probablemente hasta mañana a última hora de la tarde, que es cuando se cumple el plazo máximo durante el cual puede ser interrogado por la Policía antes de su entrega a la Justicia.

Dos días vigilando el concesionario

Ese comando de ETA estuvo vigilando el concesionario donde robó los automóviles a lo largo del lunes y el martes, según ha apuntado el gerente del establecimiento, Antoine de Sousa, en una entrevista publicada hoy por el periódico Le Parisien. "La víspera y el día del tiroteo por la mañana habíamos notado unas extrañas idas y venidas de coches delante del aparcamiento. Uno de ellos incluso se detuvo, pero no le dimos importancia", ha señalado.

El robo en la agencia de venta de automóviles Contac de Dammarie-les-Lys tuvo lugar el martes hacia las 18.20 hora local cuando sólo estaba presente un vendedor y entraron dos hombres y una mujer de pelo largo y rubio que se presentaron como clientes, ha indicado el gerente. Estos tres miembros del comando sacaron sus armas y condujeron al vendedor a la oficina, donde le cubrieron la cabeza y lo maniataron con unas cuerdas de plástico. Pudo escuchar voces en otra dependencia en la que se guardan las llaves de los vehículos y se fueron al cabo de media hora con los mismos, aunque no pudieron evitar que al hacerlo se activara la alarma.

Según el testimonio de De Sousa, los etarras se llevaron dos Peugeot 307, un Renault Laguna break y un BMW, este último el coche del empleado al que habían reducido. Todos ellos tenían más de 100.000 kilómetros, algo que extrañó al gerente del establecimiento en un principio, pero que luego ha entendido. "Querían coches de gente corriente, que no llamen la atención", ha comentado.

El gerente quedó traumatizado al saber que todo acabó con la muerte del brigada Jean-Serge Nérin y que ésta fue obra de ETA, y ha revelado que conocía al policía, que acudía a veces a su negocio en patrulla. "Una vez por descuido había apretado la alarma. Fue él quien vino y me recomendó que prestara más atención manejando el mando", ha recordado.

http://www.diariovasco.com/rc/20100319/ ... 91210.html

La Generalitat afirma que las personas que aparecen en un vídeo en un supermercado francés y que han sido identificados como etarras, son en realidad bomberos catalanes que están de vacaciones en este país, según el departamento de Interior del Gobierno catalán.

Estas imágenes fueron distribuidas este viernes por las Fuerzas de Seguridad de España y Francia y en ellas las autoridades identifican a cinco presuntos miembros de ETA que participaron en el robo a un concesionario de vehículos en el que murió un agente francés.

Según un portavoz autonómico, las personas que aparecen en este vídeo son bomberos pertenecientes tanto al cuerpo de bomberos de la Generalitat de Cataluña, como al Ayuntamiento de Barcelona y han sido identificados por sus familiares al ver las imágenes en los medios de comunicación, informa Efe.

Un portavoz de Bomberos de la Generalitat ha precisado que los tres miembros de ese cuerpo y los dos municipales están en Francia junto a otras cinco personas practicando la escalada.

Ellos mismos han alertado a sus superiores en torno a la medianoche del viernes, según este otro responsable, citado por la agencia Europa Press.

Coincidencia en lugar y fecha
El departamento de Interior de la Generalitat, tras conocer esta circunstancia, se ha puesto en contacto con la Gendarmería francesa para que los medios franceses dejen de emitir el vídeo.

Las imágenes, obtenidas por las cámaras de seguridad de un supermercado de la localidad gala de Dammarie-les-Lys, fueron grabadas un día antes del atentado, cuando se disponían a comprar en un establecimiento cercano al concesionario asaltado por ETA [ver mapa]. Según el vendedor de este establecimiento, el lunes y el martes notó movimientos extraños en las cercanías.

Según los medios franceses, los sospechosos habían sido reconocidos por compañeros de Jean Serge Nérin, el jefe de la brigada que sorprendió a los etarras y que murió en el tiroteo.

En la secuencia puede verse a cinco individuos entrando en el centro, uno de ellos empujando un carro de la compra.

Edición 175 Aniversario Gc

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gafaspolicia.com

Mutilgorria escribió:Y es que no se puede ni siquiera hablar de terroristas, cuando ni siquiera se conoce a los autores, por lo que hubiera sido todo un detalle haber puesto que no se sabía quienes eran los autores....

Ahora comprendo ese famoso vídeo del 11 m donde una persona corría carreras arriba mientras explosionaban los trenes, y donde se llego a decir, incluso se mantiene que es un famoso etarra, el cual corre a la vez que porta un mando para explosionar las bombas que había colocadas.

No hay nada peor que el vicio óptico....donde una persona, podría llegar a ver a los 12 apóstoles y jesucristo en la ultima cena.

Un saludo y mis ánimos a los bomberos afectados, los cuales, seguro que no han pasado por un buen trago, siendo terroristas y asesinos durante unas cuantas horas en Francia.

No obstante, espero que se aprenda con este error para no cometerlo en un futuro....

Cartera Porta Placa Ertzaintza

Fabricado en piel de vacuno

enpieldeubrique.com

Joseba Fernández Aspurz, 'El Guindi', único detenido tras el asesinato del brigadier-jefe Jean-Serge Nérin, ha declarado en los interrogatorios que no había recibido instrucciones por parte de la dirección de ETA para disparar contra las fuerzas de seguridad francesas. Fuentes de la investigación desmintieron que el arrestado, encarcelado desde el domingo en la prisión parisiense de La Santé, hubiera declarado que los bomberos catalanes filmados en un supermercado cercano al lugar del tiroteo fueran cómplices suyos en el comando.
En los interrogatorios policiales a los que fue sometido durante cuatro días en dependencias de la Subdirección Antiterrorista, Fernández Aspurz reconoció que había efectuado un único disparo al ser sorprendido por la patrulla, según informaron fuentes judiciales galas. Puntualizó que tiró al aire sin dar a nadie y alegó que actuó así por un acto reflejo. Aseguró que no tenía consignas de disparar contra los policías franceses y que tampoco había recibido la orden de hacerlo por parte de otro miembro del comando.
Los etarras, que tienen como norma guardar silencio durante los interrogatorios, sí suelen explicarse en los casos de tiroteos con agentes del orden franceses. Así ocurrió, por ejemplo, con Ibon Fernández Iradi, 'Susper', Alaitz Areitio, 'Arrano', o Iñaki Lizundia, que también expusieron la doctrina oficial sobre la ausencia de consignas para abrir fuego deliberado contra las fuerzas de seguridad galas.
Breve experiencia
Fernández se limitó a reconocer que había ingresado en ETA a finales del año pasado y que había seguido un cursillo de formación militar. Según el diario Le Monde, también confesó que estaba presente en el asalto al concesionario de coches usados previo al tiroteo mortal. Pero no dio ninguna indicación sobre el itinerario del comando ni sobre su composición.
El sábado por la noche fue inculpado por el juez Yves Jannier, jefe de los juzgados antiterroristas de París, de tentativas de homicidio agravado. Este cargo está penado con hasta cadena perpetua, ya que concurren las circunstancias agravantes de terrorismo, banda organizada y atentado contra un policía en el ejercicio de sus funciones. Entre la docena de delitos imputados figura incluso la receptación de extorsión de fondos en banda organizada, por los 500 euros que llevaba encima, a pesar de que esa infracción no se suele considerar cuando las sumas de dinero confiscadas son tan pequeñas.
Fuentes judiciales y policiales francesas confirmaron que fueron los tres compañeros de patrulla del brigadier Nérin quienes confundieron con presuntos etarras a los bomberos catalanes que estaban de compras en el supermercado de Villiers-en-Biere. Desde su punto de vista, el vídeo «no fue difundido a la ligera porque los guardias reconocieron formalmente a tres de las cinco personas que aparecían en las imágenes».
La Policía Judicial comprobó en la memoria de la caja del supermercado que los sospechosos habían comprado alimentos españoles y habían pagado en metálico, sin dejar los datos identificatorios correspondientes al uso de una tarjeta o cheque bancario. Pero no tuvo conocimiento de que la Gendarmería había pasado el jueves, víspera de la difusión del vídeo, por el albergue rural donde se alojaban los bomberos para tomar nota del motivo de su estancia.
Seguir todas las pistas
Los medios consultados juzgaron el episodio «muy lamentable» para los afectados e ilustrativo de la «fragilidad» de las identificaciones visuales. Pero insistieron en que estaban obligados a localizar a los sospechosos y que, afortunadamente, se ha descartado una pista que les podía haber encerrado durante meses en un callejón sin salida.
«Ninguna pista debe ser despreciada en una investigación criminal. Si lo hiciéramos, nos sería reprochado», observó un mando policial francés. «Hacemos todo para encontrar a los autores de los hechos. Verificamos todas las pistas, guste o no guste. En esta historia hemos hecho nuestro trabajo», concluyó.

El sábado por la noche fue inculpado por el juez Yves Jannier, jefe de los juzgados antiterroristas de París, de tentativas de homicidio agravado. Este cargo está penado con hasta cadena perpetua, ya que concurren las circunstancias agravantes de terrorismo, banda organizada y atentado contra un policía en el ejercicio de sus funciones. Entre la docena de delitos imputados figura incluso la receptación de extorsión de fondos en banda organizada, por los 500 euros que llevaba encima, a pesar de que esa infracción no se suele considerar cuando las sumas de dinero confiscadas son tan pequeñas.