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Los miembros de ETA que en la tarde del martes robaron seis vehículos y asesinaron a un brigadier de la Policía francesa planeaban una importante «acción de abastecimiento», según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas.
Los coches iban a ser utilizados para robar armas, explosivos o sustancias con los que éstos se fabrican. Por ello, las Fuerzas de Seguridad galas, en estrecha colaboración con las españolas, examinan todas las instalaciones susceptibles de sufrir una acción criminal de este tipo que hay en la zona, con el fin de reforzar sus medidas de seguridad.
Una mujer rubia
Entre nueve y doce pistoleros de la banda participaron en esa acción. Cuatro de ellos, entre los que había una mujer rubia, entraron en un concesionario de vehículos de ocasión, situado en Villiers-en-Biere, cerca de Dammarie-lès-Lys, en el departamento de Seine- et-Marne.
Amenazaron con sus armas a los dos empleados que se encontraban en la empresa, llamada Auto Contact. El grupo se apoderó a continuación de seis vehículos: dos Peugeot 307; un BMW; un Renault Laguna; un Citröen C-4 y una furgoneta Renault Espace.
Los coches que esperan comprador suelen tener muy poca gasolina. Por ello, los etarras se dirigieron a un lugar donde les aguardaban otros miembros de la banda y procedieron a rellenar los depósitos con unas latas que tenían preparadas.
Fue en ese momento cuando pasó por las proximidades un coche de la Policía francesa con cuatro agentes, a los que extrañó lo que estaban viendo: cuatro automóviles que, aparentemente, se habían quedado sin gasolina a la vez. Se acercaron con el fin de aclarar lo que ocurría e identificar a los que allí estaban.
A partir de este momento hay diferentes versiones. Según la que mantienen las fuentes consultadas, uno de los etarras esgrimió un arma, lo que concitó la atención de los agentes. Entonces, apareció en el lugar un quinto vehículo, al parecer el C-4 robado, desde el que se efectuaron varios disparos contra los policías. El brigadier Jean Serge Nerin, que llevaba puesto el chaleco antibalas, resultó herido. Uno de los proyectiles le había entrado por la axila (zona no protegida por el chaleco) y le había perforado la arteria pulmonar. Murió una hora después, en el hospital de Dammarie-lès-Lys, al que había sido trasladado.
La mayoría de los etarras huyeron en los automóviles robados y dos de ellos lo hicieron a pie. Cinco de los vehículos habían sido recuperados al cierre de esta edición y sólo faltaba por localizar la Renault Espace.
Los agentes consiguieron detener a uno de los terroristas que, inmediatamente, se identificó como miembro de la banda y dijo que se llamaba Joseba Fernández Aspurz. Tras el tiroteo fue encontrado en el lugar un revólver 357 Magnum del calibre 11,43.
Los expertos recuerdan que ETA sólo ha utilizado un número tan elevado de pistoleros cuando ha realizado una acción de «abastecimiento importante». Por ello, la hipótesis con la que se trabaja es que tenían previsto perpetrar un robo de material en la misma noche del martes o en la madrugada del miércoles. A este respecto, se recuerda que fue un «comando», formado por entre seis y ocho individuos, el que sustrajo, el 7 de marzo de 2001, en un almacén de la empresa francesa Titanite (fabricante del Titadyne), situado en Saint Quenin sur Isère, cerca de Grenoble, 1.600 kilos de dinamita; 23.500 metros de cordón detonante y 28.689 detonadores. En otro depósito de la misma sociedad, en Plevin, ETA robó 8,7 toneladas de explosivos en septiembre de 1999. Por estos hechos fueron juzgados quince individuos, diez de ellos presuntos miembros del Ejército Revolucionario Bretón.
Otra de las líneas de investigación es la de que ETA haya decidido, para cubrir sus necesidades en Francia, sustraer varios coches a la vez. Por ello, desde ayer se analizan los robos de este tipo que se han producido en el país galo en los últimos meses.
http://www.larazon.es/noticia/8591-los- ... explosivos
Saludos.