Oposiciones Cnp 2013 |
|
sector115.es |
Resulta curioso que se compare a un Vigilante de Seguridad (de los habilitados, no los intrusos, esos que tolera el Ministerio a toneladas) con "un trabajador normal". Vamos que hace lo mismo una secretaria de dirección en su despacho, o un conserje de un bien inmueble que un VS en un polígono por la noche, o en la puerta de ¡¡los juzgados¡¡ junto a varios Guardias Civiles, etc. Y se quedan tan tranquilos.
Luego parece que el hecho de tener, o no, carácter de agente de la autoridad, llevar un arma (de fuego) o poder escribir un atestado policial (con la famosa presunción de veracidad, que muchos mal utilizan), no significa nada. Vamos que encima los jueces machacan a los funcionarios por ello. Roquetas va a pasar a la posteridad como la gran injusticia judicial y ciudadana. Pues ni Roquetas (ciudadano que entra por su propio pie y sale en un féretro, aunque fuera cargado de droga y se "resistiera" ante un montón de agentes) ni Bilbao (violación en calabozos probada, pero sin responsable individualizado porque los funcionarios "callaron" cobardemente).
Que hay muchos VS que creen estar en el oeste americano es tan real como que hay funcionarios que denigran diariamente el uniforme que visten, pero no tiene ni punto de comparación la protección que tienen unos y otros. No es igual ser un simple ciudadano, sin protección jurídico-penal alguna, sin posibilidad de llevar un arma que por lo menos sirva de autodefensa y sin capacidad de que su testimonio se presuma "veraz", que gozar de la protección que otorgan ciertos delitos "cualificados" por razón del sujeto pasivo, el poder llevar un arma, y el privilegio que otorga declarar (y escribir) cuando lo declarado pesa mucho más que lo diga cualquier testigo, no ya el imputado.
Por lo menos no nieguen la mayor.
Y no tengo nada que ver con la seguridad privada, es más para mí el estado nunca debería poner el manos de particulares ese ámbito de competencias.