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Después de mucho leer, valorar y buscar aquí y allá, en el caso de que los Moderadores no tengan ningún inconveniente, abro este hilo para ir colgando regularmente enlaces a algunos artículos y vídeos con información de acceso público, en lo que se refiere al terrorismo islamista, en general, y en sus diversas vertientes, en particular. En la medida de lo posible, trataré de suministrar los datos de las fuentes, así como de las webs utilizadas. En primer lugar, comenzaré con una serie de artículos más antiguos, para ir siguiendo un cierto orden cronológico, aunque me temo que va a resultar algo difícil de conseguir, así como hacer una clasificación temática más concreta, lo que dejo aparcado de momento, hasta disponer de más tiempo, y de un mayor volumen de información. Por todo ello, os pido disculpas y vuestra indulgencia por mi -más que previsible, inevitable- falta de coherencia...
Para ir comenzando:
2005
INFILTRACIÓN TERRORISTA EN LAS COMUNIDADES DE INMIGRANTES:
http://www.uned.es/investigacion/public ... 200507.pdf
LOS TERRORISTAS DE ORIGEN MAGREBÍ EN EL YIHADISMO INTERNACIONAL:
http://www.uned.es/investigacion/public ... nero05.pdf
(Ambos artículos publicados en el IUISI, Instituto Universitario de Investigación sobre Seguridad Interior).
2006
EL RADICALISMO ISLAMISTA EN EL MAGREB: desarrollos recientes de un terrorismo persistente:
( Artículo publicado en el IUISI, Instituto Universitario de Investigación sobre Seguridad Interior, 2006).
1. Introducción.
Aunque aparentemente la actividad terrorista se ha reducido en los últimos tiempos en los cinco Estados que componen la Unión del Magreb Árabe (UMA) - Argelia, Libia, Marruecos, Mauritania y Túnez - un inventario de las actividades terroristas propiamente dichas pero también del activismo proselitista de los diversos grupos que apoyan, amparan o justifican la actividad violenta dentro y fuera de la subregión nos ofrece datos inquietantes. No sólo la determinación de algunos terroristas de origen magrebí para convertirse en suicidas tanto en sus propios países - en Túnez en 2002 y en Marruecos en 2003 tras una pionera y aislada experiencia en Argelia en 1995 - como fuera de ellos - Irak entre 2003 y 2005[1] y España en 2004 - sino también otros fenómenos como su activismo armado sobre el terreno que va adquiriendo una progresiva amplitud transregional - con el ataque del Grupo Salafista para la Predicación y el Combate (GSPC) argelino en suelo mauritano en junio de 2005 y los enfrentamientos en el Sahel en los dos últimos años, desde Chad hasta Malí pasando también por Níger - nos obligan a un seguimiento detallado de su evolución para poder combatirlo mejor en colaboración con las autoridades nacionales de los países implicados.[2]
Como quiera que en los últimos tiempos existe un creciente debate interno en los países magrebíes sobre la necesidad de incluir a los partidos y movimientos islamistas en el juego político - en Argelia y en Marruecos lo están desde hace años, con el antiguo Hamas aportando incluso ministros al Gobierno de coalición y dicho partido y también el partido Islah con presencia parlamentaria, para el primer caso, y con la visible presencia en la arena política y en el Parlamento del Partido para la Justicia y el Desarrollo (PJD) en Marruecos -, y como quiera también que algunos sectores islamistas han estado e incluso pueden seguir estando si no siempre vinculados sí al menos ligados por ciertas fidelidades a grupos más radicales que defienden la vía violenta dentro y/o fuera de sus países, es obligado proceder a estudiar su evolución así como su percepción y su opinión sobre el ejercicio de la violencia, y lo es tanto para las autoridades nacionales de los países interesados como para el resto, y más aún para los vecinos inmediatos como es el caso de España, enmarcándose todo ello en el necesario y legítimo esfuerzo que debe mantenerse en el tiempo para combatir al terrorismo yihadista en todos sus frentes.
2. El activismo terrorista en suelo magrebí en los últimos tiempos
A continuación procederemos a destacar país por país las acciones terroristas más importantes ubicándolas en el proceso político y social general de cada caso.
2.1. Argelia
Tanto el GSPC como el Grupo Islámico Armado (GIA), de una de cuyas escisiones producida en 1998 procede el anterior, siguen siendo grupos terroristas activos en suelo argelino, con mayor visibilidad para el caso del primero pero sin desdeñar la capacidad que aún conservan algunas células del segundo, tanto para realizar atentados como para aprovechar algunas de sus facilidades (reclutamiento y proselitismo, tráficos ilícitos de dinero sucio y de armas, etc) en la consecución de acciones tanto bajo sus siglas clásicas como en células mutantes. Los sucesivos "emires nacionales" del GIA - Djamel Zitouni, Antar Zouabri (Abu Talha), Rachid Abou Tourab - fueron eliminados por las fuerzas de seguridad argelinas hasta llegar a dar por desaparecido al Grupo pero insistimos en la vigencia de algunas de sus células activas y de sus redes de apoyo dentro y fuera de Argelia.
Hoy por hoy el GSPC es el mayor grupo terrorista islamista actuando en todo el norte de África - algunos calculan que sus filas incluyen entre 4.000 y 5.000 miembros -, el mejor dotado de fondos o de los instrumentos para conseguirlos y el mejor organizado. Aunque ha sufrido escisiones contínuas no debe olvidarse que como tal GSPC ha rechazado todo entendimiento con el Estado argelino, al que considera "apóstata" en la línea purista de los grupos yihadistas y de la red de redes Al Qaida a la que ha rendido pleitesía en octubre de 2003, y ha rechazado las dos ofertas de amnistía lanzadas por el Presidente Abdelaziz Buteflika desde su llegada al poder en 1999: una primera - la Concordia Civil - en el mismo año 1999 y la más reciente - la Carta para la Paz y la Reconciliación Nacional - refrendada el 29 de septiembre de 2005. [3]
La financiación del GSPC procede de los robos que realiza, de algunas fuentes basadas en la caridad (zaqat), de las actividades delictivas en suelo europeo y del lucrativo negocio de los secuestros.[4] El más espectacular, y el que le procuró importantes fondos útiles aún hoy, fue el secuestro de 32 extranjeros en el profundo sur argelino en febrero de 2003, la mayoría de ellos turistas alemanes. Aunque una parte del grupo fue liberada por las fuerzas especiales argelinas a los dos meses del secuestro y aunque una de las rehenes falleció durante el cautiverio el resto del grupo fue liberado tras una compleja negociación que incluyó al propio GSPC, al Gobierno alemán que pagó un jugoso rescate por ellos. El líder del GSPC que obtuvo los 5 millones de dólares, Amara Saïfi (Abderrazak el Para), usó dicha suma para comprar armas y reclutar nuevos combatientes en la amplia franja de actuación del Grupo en el Sahel, entre Mauritania y Chad. En septiembre de 2003 el Gobierno alemán emitió una orden internacional de arresto contra Saïfi acusándole de secuestro, extorsión, pertenencia a grupo terrorista y chantaje al Gobierno alemán.
En marzo de 2004 Saïfi fue capturado por fuerzas chadianas rebeldes del Movimiento por la Democracia y la Justicia en Chad (MDJC) en el norte del país, que negoció su entrega a Argelia durante varios meses, hasta junio de 2004, pero sin resultado. Entre el 8 y el 9 de marzo de 2004 el GSPC sufría uno de sus peores reveses en el nuevo teatro de operaciones sahariano que venía desarrollando: 42 de sus miembros morían en el norte de Chad, en la región del Tibesti y cerca de la frontera con Níger, en un enfrentamiento con tropas chadianas posibilitado por la inteligencia proporcionada por aviones PC-3 de la VI Flota estadounidense. Tanto los miembros del GSPC muertos - 9 argelinos y el resto de Níger, Malí y Nigeria - como los que fueron hechos prisioneros en esta operación - 3 de Níger, 1 de Chad y 1 de Argelia - mostraban ya el perfil multinacional del GSPC, algo que se ha mantenido hasta ahora especialmente en su frente meridional sahariano-saheliano.[5]
A fines de junio de 2004 el líder supremo del GSPC, Nabil Sahraoui (Mustafá Abou Ibrahim) y sus tres máximos lugartenientes murieron en un enfrentamiento con militares argelinos en la provincia de Bejaia, en el noreste de Argelia, lo cual supuso un duro golpe para el Grupo aunque este pronto se recuperó. Con dichas muertes la importancia de Saïfi creció por ser ya el último de los líderes clásicos con vida. Por ello las presiones del Gobierno de Argel sobre el MDJC se incrementaron apoyándose para ello en las autoridades libias en una de las escasas ocasiones en las que la cooperación intramagrebí ha funcionado de forma operativa en la lucha contra el terrorismo. En julio de 2004 el Gobierno libio, que guarda gran influencia en grupos rebeldes que actúan en la región saheliana, amenazó al MDJC con bombardear sus campos si no le entregaba a Saïfi. Este finalmente fue entregado a los libios quienes lo pasaron a los argelinos. Actualmente quien fuera uno de los líderes más conocidos del sanguinario GSPC está en prisión tras haber sido juzgado con otros tres cuadros del Grupo y condenado a cadena perpetua en Argel en junio de 2005.[6]
Tras la muerte de Sahraoui asumió el mando del GSPC Abdelmalek Droukdel (Abou Mossab Abdelouadoud), quien había sido anteriormente el responsable de explosivos del Grupo y era uno de los pocos líderes históricos supervivientes. Nacido en 1971, estudió dos años en la Universidad antes de unirse al GSPC. El GSPC iniciaba pues 2005 en un marco de declive de sus actividades por los golpes sufridos e intentando un proceso de regeneración tanto de su liderazgo como de su aparato ideológico. En diciembre de 2004 una fracción supuestamente del GSPC, la denominada "Organización de Al Qaida en la Tierra de los Bereberes", había rendido pleitesía a Al Qaida y más recientemente, en mayo de 2005, anunciaba su creación "Al Qaida del Yihad en Argelia" para superar la desmoralización de los grupos yihadistas en suelo argelino, su asociación con la masacre de civiles y la escasa lealtad y débil compromiso de algunos de sus líderes, y pidiendo un nuevo esfuerzo por "una nueva causa".
A lo largo de 2005 este GSPC aparentemente en declive pero aún vigoroso se ha visto involucrado en diversas acciones terroristas de las que destacaremos las más significativas. En enero de 2005 asesinaba a 18 miembros de las fuerzas de seguridad en Biskra, sede de la Brigada Paracaidista argelina que había perdido a 39 de sus miembros en una emboscada también del GSPC dos años antes, el 4 de enero de 2003, acción terrorista esta última que rodada en vídeo por los autores aún circula por círculos yihadistas de todo el mundo. En abril de 2005 negó su autoría en el asesinato de 14 civiles al sur de Argel en un falso control de carreteras, pero las autoridades sospechaban tanto de él como de alguna célula del GIA. En mayo de 2005 el GSPC reivindicaba su autoría en dos atentados con bomba producidos el día 15 de ese mes: en el más grave de los dos ataques, producido en las cercanías de Khenchela al este de Argel, en el que el explosivo fue activado al paso de un camión militar los terroristas produjeron la muerte de 12 soldados que fueron ametrallados tras la deflagación. En el otro ataque, producido en la provincia oriental de Skikkda, el GSPC detonó la bomba al paso de una patrulla militar hiriendo a 7 soldados. Estos fueron los peores ataques realizados por el GSPC desde hacía meses y se producían a las pocas semanas de una gran ofensiva militar contra las bases del GSPC. Durante el verano hemos de destacar, entre otros, los siguientes ataques terroristas: el 8 de junio el GSPC asesinaba a 13 miembros de la Guardia Comunal en Ain Rich, el 30 de junio una unidad militar se enfrentaba con terroristas del GSPC que introducían armas desde Malí y el 20 de agosto, un mes antes del referéndum sobre la reconciliación (Moussalha), eran asesinados seis civiles a manos de islamistas radicales en Batna.[7]
En junio de 2005 el GSPC realizaba su acción más sonada desde el secuestro de los turistas occidentales en el Sáhara en febrero de 2003 y que algunos han interpretado como un intento por recuperar su credibilidad dentro y fuera del país. Por otro lado, el GSPC ha intentado con su activismo en 2005 mostrar también su rechazo a la propuesta de amnistía del Presidente Bouteflika, considerada por los yihadistas salafistas como una opción entreguista propuesta por el Estado apóstata que debe ser combatida sin tregua.[8] En su primer ataque fuera de Argelia, y siempre en su novedoso escenario de actuación sahariano-saheliano, reivindicaba su autoría en el ataque al puesto militar mauritano de Lemgheity, en el que asesinó a 15 soldados mauritanos e hirió a 17. Realizado por el Grupo Salafista Libre dirigido por otro histórico del GSPC, Mokhtar Belmokhtar, que opera con cierta autonomía del GSPC, fue reivindicado no obstante en la página web de este último "para vengar a los hermanos recientemente capturados por el régimen converso mauritano, y para apoyar a los debilitados musulmanes allí". En efecto las operaciones del régimen mauritano contra círculos yihadistas habían dañado no sólo a militantes y células mauritanas sino también las infraestructuras auspiciadas por el GSPC para entrenar combatientes para el teatro magrebí pero también para el irakí. Por ello no es extraño que este ataque en suelo mauritano fuera también celebrado por los yihadistas salafistas de la Organización de Al Qaida en la Tierra de los Dos Ríos, la sección de la red de redes en Irak.[9] En conexión con Irak cabe recordar que el asesinato de dos diplomáticos argelinos por los yihadistas en Irak en julio tuvo un gran impacto en el país, con consecuencias en el mundo político. El número dos del ilegalizado Frente Islámico de Salvación (FIS), Ali Belhadj, excarcelado en julio de 2003 tras cumplir una condena de 12 años, era detenido el 27 de julio acusado de hacer apología del terrorismo en unas declaraciones a la cadena qatarí Al Jazira en relación con dichos asesinatos.[10]
Por otro lado, la internacionalización progresiva del terrorismo yihadista es cada vez más visible en Argelia, donde el número de extranjeros detenidos se ha incrementado en los últimos meses en una evolución que preocupa mucho a los responsables de la lucha antiterrorista en el país. Así, el mismo día en que se anunciaba el rendimiento de pleitesía a Al Qaida antes citado, seis estudiantes yemeníes eran detenidos en la ciudad de Annaba, en el este del país, bajo la sospecha de que pertenecieran a una red ligada a Al Qaida.[11] Esta detención se unía pues a la fidelización a Al Qaida y al creciente activismo en el sur, demostrando bien una creciente coordinación de las células con el activismo yihadista internacionalizado o, al menos, una ubicación acelerada de los activistas argelinos en dicho combate universal. En cualquier caso la acción en suelo mauritano demuestra que el teatro de operaciones se ha ampliado para el GSPC y sus grupos afines y en los días 12 y 13 de junio, una semana después del ataque en Lemgheity, activistas del GSPC y del Ejército mauritano se enfrentaban en el desierto cerca de la frontera con Malí. Argelia ha desplegado más hombres en su frontera suroccidental y existe un esfuerzo internacional coordinado para intentar frenar la expansión de la influencia del GSPC en el Sahel, con los EEUU aportando inteligencia y entrenamiento militar a los países de la región.
Siguiendo en la línea de la internacionalización del terrorismo por parte de los grupos argelinos es preciso destacar que, en España, el Consejo de Ministros de 4 de noviembre de 2005 ha acordado, a propuesta del Ministro de Justicia, conceder a Argelia la extradición de los presuntos terroristas Abdelkrim Hammad (Abdelnasser), del GIA, entrenado en Afganistán donde combatió además de en Bosnia y Kosovo y acusado en Argelia de homicidio con premeditación, y Mohamed Benaboura (Zacarías), del GSPC, detenido en España en enero de 2003 y acusado en Argelia de asesinato terrorista, robo y estragos, mientras que el Tribunal Constitucional rechazaba amparar al activista del GIA Noureddine Salim Adoumalou, condenado en 2001 a 14 años de cárcel en nuestro país.[12] Por otro lado, la Guardia Civil detenía el 23 de noviembre en el marco de la denominada "Operación Gamo" a once hombres en Alicante, Granada y Murcia acusados de constituir una célula de apoyo logístico y financiero al GSPC.[13]
2.2. Marruecos
En el Reino de Marruecos la red clandestina Salafiya Jihadiya ha representado el gran paraguas del radicalismo yihadista.[14] Tras los atentados suicidas de 16 de mayo de 2003 en Casablanca, las autoridades marroquíes procedieron a detener a los diversos líderes de los grupúsculos que entonces podían ser ligados al activismo terrorista o potencialmente terrorista. Así fueron capturados Mohamed Neggaui, un dirigente de los muyahidin marroquíes desde mediados de los años ochenta, o Bendaud al Jamly, este último detenido en Nador acusado de de ser el emir de los "takfiristas", si bien es preciso destacar que en Marruecos este último grupo ha carecido tradicionalmente de una sólida estructura organizativa.[15]
En los tiempos más recientes el islamismo en Marruecos ha cobrado protagonismo en frentes como la oposición a la reforma de la Mudawwana, el Código de Estatuto Personal que finalmente ha sido reformado por impulso del Rey Mohamed VI, marcándose cada vez más la diferencia entre el islamismo legal del Partido para la Justicia y el Desarrollo (PJD), del islamismo tolerado de Justicia y Caridad y de los emergentes grupos clandestinos bajo el gran paraguas de la Salafiya Jihadiya que han aprovechado tanto las movilizaciones en el país - contra la Mudawwana, contra la guerra contra el terrorismo o contra la guerra de Irak - para tratar de atraerse partidarios y para enfrentarse al poder.
La Salafiya Jihadiya preconiza la reconstrucción del Califato pero a diferencia de Justicia y Caridad cree que tal objetivo nunca podrá lograrse por medios pacíficos. Los líderes espirituales de la Salafiya Jihadiya son los egipcios Sayyid Qutb y Omar Abdel Rahman; el clérigo jordano-palestino Abu Qutada; y el propio Osama Bin Laden. Fundada a principios de los noventa por los voluntarios marroquíes que regresaban de Afganistán la red contó en su origen con doce líderes entre los que destacaban Mohamed Fezzani en Tánger, Omar el Hadduchi en Tetuán y Zakariyya Miloudi en Casablanca, este último considerado el mando supremo de la red. A lo largo de la pasada década la red se consolidó a través de un cuidadoso reclutamiento de miembros en los arrabales de las grandes ciudades creándose células de tres o cuatro activistas que comenzaron a recibir entrenamiento militar en campos de diversos países.
En el verano de 2002 muchos de sus activistas fueron detenidos en Casablanca junto a tres saudíes acusados de organizar ataques terroristas.[16] Algunos de ellos admitieron haber sido entrenados en el manejo de explosivos y armas en campos de Al Qaida en Afganistán y Pakistán. En junio un guardia de seguridad del aeropuerto de Casablanca había sido detenido junto a otros dos compatriotas dentro de la operación que desbarató una ofensiva terrorista de Al Qaida de atacar barcos británicos y estadounidenses de patrulla en el Estrecho de Gibraltar - emulando el ataque contra el "USS Cole" en el puerto de Adén en octubre de 2000 que mató a 17 tripulantes -, colocar una bomba en un café de Marrakech y atacar autobuses turísticos a lo largo del país. Al éxito de la operación antiterrorista contribuyó la información facilitada por marroquíes detenidos en Guantánamo.
Hasta su detención en agosto de 2002 Miloudi promovió actos de violencia contra la policía, contra los traficantes de drogas y contra los consumidores de bebidas alcohólicas. Se estima que hacia septiembre de 2002, en la víspera de las elecciones y cuando la red había sido ya diezmada con un gran número de detenciones, esta incluía a unos 400 militantes dispuestos al martirio y cuyo objetivo era combatir no sólo a los infieles sino sobre todo a los apóstatas dentro y fuera de Marruecos. En las obras de Hadduchi o de otros líderes como Abdelkrim Chadli o Mohamed Fizazi se encuentran estas ideas que Mohamed Darif relaciona muy acertadamente con el contenido del V Artículo de la Carta del GSPC: "Combatir a los renegados es prioritario en relación con el combate que debe ser lanzado contra los infieles originales y su castigo debe ser más fuerte que el que debe ser infligido a los infieles. No tienen que ser objeto de ningún respiro ni gracia y la única opción que tienen es arrepentirse o la espada".[17]
En enero de 2003 la Gendarmería Real detenía la Sargento Yousef Amani por robar fusiles de asalto AK-47 Kalashnikov en el Cuartel de Guercif para entregárselos a una célula terrorista de la región de Meknes. El 16 de mayo de ese año se producían los cinco ataques terroristas suicidas sincronizados antes citados, que provocaron 45 muertos y fueron atribuidos a una facción de la Salafiya Jihadiya conocida como Al Sira Al Mustaqim (Correcta Vía). Esta acción terrorista permitió a la sociedad abrir los ojos a una realidad que hasta entonces no se había querido ver, y ello a pesar de los precedentes indicios ya citados. Todos los suicidas eran jóvenes marroquíes desempleados que habitaban el suburbio de Sidi Moumen, en la propia Casablanca. Estos ataques llevaron a la detención de unas 5.000 personas obligando desde entonces a los radicales a adoptar múltiples medidas de seguridad como ocurriera en Argelia en 1992 tras la interrupción del proceso electoral y la posterior ilegalización del Frente Islámico de Salvación (FIS).
Cuando un año después, en marzo de 2004, una encuesta realizada por el Pew Research Center mostraba entre sus conclusiones que el 45% de los marroquíes encuestados tenía una imagen positiva de Osama Bin Laden frente a un 42% que lo rechazaba otras alarmas se activaron al descubrir una amplia semilla de radicalismo.[18] También en 2004 un informe de la Dirección de Seguridad del Territorio (DST) establecía que el número de extremistas se habría multiplicado por 70 desde 1996, de unos 40 individuos hasta unos 3.000.[19] Por otra parte, en ese mismo año 2004 se filtraba la noticia de que Marruecos habría informado al juez Baltasar Garzón de que había perdido el rastro de al menos 400 militantes islamistas radicales entrenados en campos de Al Qaida en Afganistán, Bosnia y Chechenia mientras que sí tenía identificados y controlados a unos 200.[20]
En términos organizativos podemos considerar que existen dos niveles en el salafismo marroquí: por un lado está el de sus clérigos e ideólogos, entre los que se encuentran los jeques Abu Hudeifa (Ahmed Rafiqui), Abu Hafs y Hassan el Kettani, quienes fueron adoctrinados por algunos de los más destacados representantes del salafismo internacional como los saudíes Ibn Al Baz, el jeque Al Bani o el jeque Al Hawali.[21] En el segundo nivel se situarían las células violentas activas en general en núcleos urbanos como Casablanca, Salé, Tánger, Tetuán, Nador o Meknes, este último con un notable activismo en los dos últimos años. Estos grupos y células combinan el uso de la violencia - cotidiana contra los que consideran apóstatas y en ocasiones en enfrentamientos contra miembros de las fuerzas de seguridad - con actividades delectivas comunes.
Como muestra de la capacidad organizativa y del pulso permanente de los salafistas con el poder político hemos de destacar cómo los citados jeques Abu Hafs y Hassan el Kettani han coordinado a través de teléfonos móviles desde sus celdas de la prisión de Kenitra una masiva huelga de hambre de 700 presos islamistas en mayo de 2005.[22] Este pulso entre los presos islamistas y sus familias y el Gobierno marroquí ha provocado, en especial, réditos políticos para el mundo islamista que ha demostrado tanto su capacidad de organización como su voluntad de desafiar permanentemente a un poder que considera apóstata y corrupto. Por otro lado, las hermanas Sanae e Imane Laghriss, que fueron condenadas en 2004 por preparar atentados suicidas en Rabat, obtuvieron este verano el perdón real comprometiéndose a un comportamiento acorde con la ley en el futuro, en una medida que podríamos considerar como consecuencia directa de la presión antes citada.
A fines de julio de 2005 una treintena de yihadistas fueron detenidos en Casablanca y en otras ciudades marroquíes y la mayoría de ellos comparecieron ante el Tribunal Especial de Casablanca el 12 de agosto. Posteriormente se ha producido otra gran redada, el 24 de noviembre, en la que han sido detenidos 17 islamistas - incluyendo dos ciudadanos belgas de origen marroquí, Khalid Azig y Mohamed R´ha, enviados por Al Qaida como reclutadores - acusados de pertenencia a Al Qaida y de preparar atentados en diversos lugares de Marruecos; el día 25 de noviembre todos los detenidos eran enviados a la prisión de Salé hasta que el 7 de diciembre comparezcan ante el juez. Según el diario Al Ahdath al Maghribia, al que se considera bien informado en materia de seguridad, filtraba que los objetivos de dicho grupo eran dos hoteles y una gran empresa de Casablanca, así como algunos edificios gubernamentales en Rabat, objetivos todos ellos que los detenidos habían fotografiado profusamente. Azig que había estudiado Teología en Siria y viajaba frecuentemente a Turquía llegó a Marruecos en junio mientras que R'ha llegó en septiembre. Ambos, con importantes contactos en círculos yihadistas europeos, tenían la misión de reclutar y formar una célula, de asignarles los objetivos y de abandonar el país antes de que se llevaran a cabo los atentados.[23] Entre los quince reclutados se encuentran dos marroquíes que Washington entregó en agosto de 2004 a Marruecos tras tenerlos dos años como prisioneros en Guantánamo - Brahim Bencherun y Mohamed Mazouz - aunque un tercer ex-prisionero de la base estadounidense, Redouane Chekkouri, que también estaba en libertad condicional tras su entrega a Marruecos está igualmente desaparecido desde el pasado 11 de noviembre. Según el experto en yihadismo marroquí Mohamed Darif, Profesor de Ciencias Políticas en la Universidad de Mohammedia, estas detenciones se ubican además en un contexto delicado marcado por la liberación por orden real a mediados de noviembre de 10.000 presos enre los que se encuentran más de 150 salafistas, decisión esta última que inquieta a quienes tienen la misión de combatir el terrorismo pero también a diversos sectores de la sociedad marroquí.[24]
2.3. Túnez
La prohibición de Ennahdha (Renacimiento, el antiguo Movimiento de Tendencia Islámica, MTI) en 1990 - sin haber estado nunca legalizado este grupo pasó a estar oficialmente perseguido -, acusado de haber participado en diversos ataques terroristas en centros turísticos del país en la segunda mitad de los años ochenta, marcó el inicio de una política represiva contra las corrientes islamistas que perdura hasta hoy. Además, en diciembre de 1990, Ennahdha fue acusada de estar involucrada en un ataque terrorista contra una sede del partido gubernamental Agrupación Constitucional Democrática (RCD) en Túnez que provocó la muerte de un vigilante. En el verano de 1992, tras las grandes operaciones policiales contra un islamismo que había aprovechado, como en el resto de los países del Magreb, la coyuntura internacional marcada por la Segunda Guerra del Golfo en 1991 para manifestarse y presionar en la calle, tuvo lugar en Túnez un macrojuicio contra 171 islamistas, 50 de ellos miembros de las fuerzas armadas y de las fuerzas de seguridad. Desde entonces, los islamistas han tenido prohibido cualquier tipo de proselitismo en el país, con las mezquitas y otros centros controlados viéndose obligados a moverse en redes clandestinas y, al menos un nutrido grupo de ellos, a actuar en el exterior.[25] Hoy algunas fuentes cifran en 500 el número de prisioneros de conciencia o de opinión siendo una buena parte de ellos islamistas.
En abril de 2002 Túnez vio con costernación cómo se convertía en escenario de un luctuoso atentado suicida: un ciudadano tunecino, Nizar Ben Mohamed Ali Bechir Naouar, se lanzaba con un camión cargado de explosivos contra la sinagoga de La Ghriba, en la isla de Djerba, asesinando a 22 personas, la mayoría de ellas turistas alemanes, e hiriendo gravemente a otras 30. Este atentado suicida, el segundo en todo el Magreb tras el que en 1995 destruyó la Comisaría Central de Argel en el Boulevard Colonel Amirouche provocando la muerte de más de 50 personas, ocurría un año antes de los atentados suicidas de Casablanca antes citados. Dos meses antes, el 31 de enero de 2002, el Tribunal Militar de Túnez condenaba a 10 años de prisión a Béchir Ben Zayed, un terrorista islamista tunecino entregado en el verano de 2001 por Argelia, donde colaboraba con el GIA.[26]
En julio de 2005 el Presidente tunecino, Zine el Abidine Ben Alí, descartaba toda posibilidad de diálogo e incluso de reconocimiento de movimientos islamistas y lo hacía al anunciar nuevas leyes que van a ofrecer posibilidades nuevas a los grupos opositores. No hay lugar, renovaba el Presidente su tradicional política, para partidos o movimientos que pretendan monopolizar la religión y servirse de ella. Legalmente la prohibición se extiende tanto a partidos políticos clásicos como a asociaciones caricativas tanto nacionales como internacionales e incluso a individuos. La intervención presidencial viene a despejar algunas dudas surgidas sobre la posibilidad de incorporar a parte de los islamistas y el Gobierno ha rechazado conceder el estatuto de prisionero de conciencia a los seguidores de Ennahdha condenados en el susodicho juicio del verano de 1992.
A pesar de la firmeza del régimen del Presidente Ben Alí es preciso destacar que durante las celebraciones del 48º aniversario de la República, celebrado en marzo de 2004, el perdón presidencial fue concedido a un buen número de presos - entre los que presumiblemente hubo islamistas - y en noviembre del mismo año hubo una segunda amnistía en la que ya sí se confirmaba la liberación de varias docenas de islamistas incluyendo algunos líderes de Ennahdha.[27] Dos meses después, en enero de 2005, fuentes de Ennahdha describían una reunión entre el Embajador de Túnez en Ginebra y una delegación de Ennahdha dirigida por el propio Ghannouchi, y tiempo después se filtraban los contactos secretos entre Moncef Marzouki y Néjib Chabbi celebrados en Túnez en abril. Incluso podemos señalar el surgimiento de un nuevo partido político, la Agrupación para la Reforma Democrática dirigida por Khaled Traouli, que estaría próximo al liderazgo de Ennahdha, con un programa de reconciliación con el Estado muy similar el desarrollado este último año en Argelia en conexión con el programa de reconciliación nacional (Moussalha) aprobado en referéndum el 29 de septiembre de 2005.[28]
Entre las últimas medidas destinadas a reforzar aún más la seguridad en Túnez, extrema por la celebración de la reciente Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información en noviembre, debemos destacar la introducción en agosto de 2005 de una fórmula que permite el control electrónico de los fieles que pretenden rezar en una mezquita. El nuevo Ministro de Interior, Al-Hadi Mehanna, ha establecido que los files deberán en adelante ir provistos de una tarjeta magnética para prevenir el caos existente hasta ahora en algunos centros de culto: la tarjeta identificará automáticamente a los fieles y la mezquita a la que acuden que normalmente deberá ser la más próxima a su domicilio.
2.4. Libia
El líder libio, Coronel Muammar el Gadaffi, ha sido considerado tradicionalmente por Al Qaida y por otros actores islamistas radicales un enemigo a batir. En febrero de 2005 operaciones antiterroristas en la región montañosa conectando Darna con Al Bayda, en el este de Libia, se llevaban a cabo incluyendo la importante ciudad de Bengazi, la segunda del país. Según algunas páginas electrónicas de grupos islamistas radicales los enfrentamientos se extendieron en la región hasta mayo de este año. Así, el 30 de mayo una célula de Al Qaida dirigida por el jefe local del grupo, Abu Al Bara Al Libi, anunciaba que preparaba un ataque a Darna, ciudad costera del este de Libia que ha sido escenario tradicionalmente de enfrentamientos entre islamistas radicales y fuerzas de seguridad desde fines de los noventa. El mensaje, citado por el periódico árabe Al Quds Al Arabi y que incluía también otros posibles objetivos, entre ellos el propio Gadaffi, afirmaba que para evitar este ataque Libia tendría que liberar de inmediato a uno de los líderes de la red encarcelados. El día 31 de mayo la página electrónica libia Akhbar Libya, en árabe, publicaba un comentario anónimo de alguien "ligado a las fuerzas de seguridad" que advertía que de realizar tales acciones llevarían a Gadaffi a bombardear in piedad las ciudades citadas borrándolas de la faz de la tierra" y, de hecho, tales amenazas de ataques islamistas no se han materializado hasta la actualidad.[29]
Como también vienen haciendo las autoridades argelinas, las libias tratan de controlar lo más posible sus volátiles fronteras meridionales. En junio de 2004 los servicios libios de inteligencia descubrían un campo de entrenamiento del GSPC, donde se probaban explosivos y diversos tipos de armas, en la frontera libia con Chad, en la región montañosa del Tibesti, hecho que despertó los temores occidentales de que intereses estadounidenses o europeos en África pudieran ser atacados. De hecho, la presencia de islamistas radicales en suelo libio sigue constituyendo una gran preocupación para las autoridades libias y occidentales, en especial para las europeas. El 20 de enero de 2005 la policía italiana estudiaba la posibilidad de que existieran vínculos entre una red de inmigración irregular entre Libia e Italia compuesta por 29 individuos, que había sido desmatelada en Catanzaro, y grupos islamistas radicales. Dicho grupo se componía de egipcios, sudaneses y marroquíes residentes en Crotone o en la vecina Isola Capo Rizzuto pero también habían sido detenidos algunos elementos en Milán y en Bergamo.
En cuanto a la cooperación de Libia con Argelia en lo que a la lucha antiterrorista respecta hemos de recordar cómo en julio de 2004 las autoridades libias amenazaron con bombardear el campo rebelde del Movimiento por la Democracia y la Justicia en Chad (MDJC) si dicho grupo no les entregaba al terrorista Amara Saïfi, quien finalmente sería enviado a Argelia como vimos anteriormente. Por otro lado, y aunque no se haya producido en suelo libio, es muy importante destacar la detención en las proximidades de Peshawar en mayo de 2005 del considerado número tres de Al Qaida, el libio Abu Faraj Al Libbi, quien sucediera a Khaled Sheikh Mohamed (Mukhtar) al frente del Comité Militar de Al Qaida cuando este fue detenido en la localidad paquistaní de Rawalpindi en marzo de 2003. Abu Faraj Al Libbi estaba acusado por el Gobierno paquistaní de haber participado en los dos intentos de asesinato sufridos por el Presidente Pervez Musharraf en diciembre de 2003 y ha sido entregado a las autoridades estadounidenses en junio de este año. Otras figuras relevantes de origen libio y pertenecientes a Al Qaida están ya en manos estadounidenses: tal es el caso de Omar Deghayes, detenido en Guantánamo y que comenzó esta primavera una huelga de hambre para tratar con ello de obtener una pronta liberación.
2.5. Mauritania
La política del régimen del ya hoy ex-Presidente Maaouya Ould Sid Ahmed Taya, derrocado por un golpe de Estado dirigido por el Coronel Ely Ould Mohamed Vall el 3 de agosto de 2005, de mantener firmes vínculos tanto con Occidente como con Israel y de actuar sin tregua contra los círculos islamistas en su territorio había hecho de Mauritania un objetivo para las redes yihadistas. Por otro lado, el establecimiento de relaciones diplomáticas plenas con Tel Aviv y la visita del Ministro israelí de Asuntos Exteriores, Silvan Shalom, a Nouakchott en mayo de 2005 habían provocado el rechazo de algunos círculos islamistas y nacionalistas árabes dentro del país. Además, el horizonte de convertirse desde fines del presente año 2005 en un productor de hidrocarburos lleva a los círculos islamistas más rigoristas a preocuparse ante el previsible enriquecimiento rápido, que conllevará probablemente la occidentalización del país y con ello la corrupción de una sociedad tradicional musulmana.
En abril de 2005 el régimen de Ould Taya había ordenado la detención de unos 50 islamistas mauritanos acusándoles de mantener vínculos con el GSPC argelino y con la red Al Qaida.[30] Según Yahsdhou Ould Amar, portavoz de la Policía mauritana, la propia Al Qaida habría financiado a algunos líderes religiosos y a sus círculos en el país en declaraciones hechas el 11 de mayo de 2005.[31] En términos nacionales el grupo denominado Caballeros del Cambio encabezaba la oposición islamista al régimen hoy derrocado y está formado en su mayor parte por miembros de la tribu Kounta asentada en la zona oriental del país, en la frontera con Malí. En mayo el Gobierno de Mauritania realizaba una nueva oleada de detenciones en círculos yihadistas.[32]
En junio de 2005 Mauritania era escenario del primer ataque fuera de sus fronteras del GSPC argelino: un total de 15 soldados mauritanos eran asesinados por terroristas del GSPC en Lamgheity, en un puesto militar ubicado en la remota región donde se encuentran las fronteras de Argelia y Malí, en el noreste de Mauritania.[33] Esa región desértica triangular es zona de tráficos ilícitos y de predominio del bandidismo y donde en los últimos tiempos las redes yihadistas buscan acólitos. El osado ataque fue reivindicado por el GSPC y le fue adjudicado por los especialistas regionales e internacionales a un subgrupo del GSPC liderado por Mokhtar Belmokhtar, el denominado Grupo Salafista Libre, que opera con cierta independencia del GSPC. El ataque puso en alerta al Ejército mauritano, se enviaron refuerzos a la zona y se reforzó la vigilancia aérea de la extensa región.
El ataque permitía por otro lado confirmar las alarmas que tanto las autoridades mauritanas como algunos servicios de inteligencia occidentales habían lanzado tiempo antes refiriéndose a que el GSPC estaba reclutando mauritanos y ciudadanos de otros países de la región del Sahel para luchar tanto en suelo argelino como en el extranjero. Ya en 2004 los EEUU lanzaron la denominada Iniciativa Pan Sahel para reforzar las capacidades antiterroristas de las fuerzas armadas y de seguridad de países sahelianos y magrebíes al percibir el Sahel como una nueva zona de proyección de los grupos yihadistas tras haber sido dispersados por las acciones antiterroristas en Afganistán y otros frentes como consecuencia del lanzamiento de una gran ofensiva contra el terrorismo tras el 11-S y tras haberse detectado precedentes inquietantes en la región como fuera el secuestro de turistas por el GSPC en el sur de Argelia en 2003.[34] En abril de 2005 la policía mauritana acusaba a los yihadistas de haber atacado una comisaría en la ciudad meridional de Aioun, cerca de la frontera con Malí, y en mayo mandos policiales aseguraban que el GSPC había entrenado a jóvenes mauritanos en campos situados en Malí y en el sur profundo argelino para realizar ataques terroristas en cualquier lugar, desde países del Magreb hasta escenarios más lejanos como Irak, Afganistán, Chechenia o los Territorios Ocupados por Israel.[35] La originaria Iniciativa Pan Sahel se ha visto actualizada y reforzada en su nueva versión, la denominada Iniciativa Trans-Sahariana Contraterrorista (TSCTI, en sus siglas en inglés) que se refleja en las grandes maniobras realizadas en el Sahel en la primera quincena de junio de 2005 con la participación de militares de los EEUU - hasta 1.000 hombres de sus fuerzas especiales -, de Argelia y de otros países de la región sobre un supuesto de ataque terrorista que la matanza de Lamgheity había hecho lamentablemente muy real días antes de iniciarse el ejercicio.[36]
El hecho de que las nuevas autoridades de Nouakchott hayan liberado al poco tiempo de llegar al poder a un primer grupo de 21 islamistas, incluyendo a líderes importantes como Mohamed Elhacen Ould Dedaw o a Mokhtar Mohamed Oul Musa, ha preocupado a los observadores extranjeros comprometidos con la lucha antiterrorista. No obstante el propio Coronel Vall transmitía en octubre un mensaje tranquilizador al respecto asegurando que el régimen no va a tolerar aproximaciones radicales al Islam y que la política exterior del país, incluyendo sus vínculos tanto con los EEUU como con Israel, no va a variar.[37]
3. Conclusiones
Tras este recorrido por algunos de los acontecimientos más destacables en términos de actividad terrorista en los cinco Estados del Magreb podemos extraer algunas conclusiones insistiendo en el hecho de que en el presente estudio nos hemos concentrado en el terrorismo en el Magreb y ya no tanto en el terrorismo ejecutado por activistas magrebíes fuera de dicha subregión.
La primera conclusión es la comprobación de que el fenómeno terrorista sigue afectando, aunque con distintas intensidades, a todos los países tratados, destacándose la importancia que tienen en ellos las redes transnacionalizadas del yihadismo salafista. En segundo lugar es destacable la desafortunada ausencia de una cooperación institucionalizada en materia antiterrorista entre dichos Estados, algo realmente grave si tenemos en cuenta la importancia que el Magreb tiene tanto como teatro de activismos terroristas muy perfeccionados con implantación sobre el terreno pero también como exportador de células a regiones limítrofes - con especial incidencia en Europa, donde a este problema se le añade el de los activistas terroristas que no son magrebíes propiamente dichos sino europeos de origen magrebí, pero también de forma creciente en el Sahel con una peligrosa expansión hacia otras latitudes del continente africano - y a lugares geográficamente lejanos pero sentimentalmente próximos para los seguidores del yihadismo salafista como son Irak, Chechenia o Afganistán. Finalmente es también destacable la necesidad de seguir con atención el debate interno que en algunos de los países tratados existe hoy entre las corrientes moderadas del islamismo político - que están ya plenamente integradas en el juego político tanto en Argelia como en Marruecos, los dos Estados de mayor peso dentro del Magreb - y que debería de servir para marcar de una forma definitiva y rotunda la diferencia entre tal aproximación a la política aceptando las reglas del juego de unos y la vía violenta y terrorista de otros: cualquier ambigüedad en este terreno, o cualquier posibilidad de doble juego por parte de algunos actores, no haría sino debilitar un combate antiterrorista que es urgente, que debe ser claro y que debe de mantenerse en el tiempo, y ello tanto dentro de cada una de las fronteras nacionales de los cinco Estados tratados como en un contexto magrebí en el que lamentablemente debemos constatar una falta estructural de cooperación antiterrorista que supone un alto precio para dichos países pero también para vecinos inmediatos como España.
El Dr. Carlos Echeverría Jesús es Profesor de Relaciones Internacionales de la UNED.
Notas
[1]Sobre le papel de los yihadistas magrebíes y euromagrebíes en Irak véase "Terrorismo. Yihadistas euromagrebíes en Irak" Informe Semanal de Política Exterior (en adelante, ISPE) nº 462, 27 junio 2005, p. 7 y "Terrorismo. Irak y el yihadismo internacional" ISPE nº 434, 29 noviembre 2004, p. 7.
[2]Para ampliar sobre el activismo terrorista de los grupos e individuos de origen magrebí fuera de sus fronteras véase ECHEVERRÍA JESÚS, Carlos: Los terroristas de origen magrebí en el yihadismo internacional Madrid, Instituto Universitario de Investigación sobre Seguridad Interior (IUISI) de la UNED, Informe nº 9, enero 2005, pp. 1-26. Sobre los antecedentes históricos del terrorismo islamista en cada uno de los cinco países tratados véase ECHEVERRÍA JESÚS, C.: "Radical Islam in the Maghreb" Orbis (Filadelfia) Vol. 48, nº 2, primavera 2004, pp. 351-364.
[3]Sobre los preparativos del referéndum véase "Argelia. Referéndum por la paz" ISPE nº 473, 26 septiembre 2005, p. 7.
[4]Sobre la desviación de la limosna recaudada como obligación religiosa (zaqat) hacia fines ilícitos y hacia el terrorismo existe el precedente del famoso Comunicado Número 49 del GIA, hecho público el 15 de octubre de 1996, y en el que los terroristas exigían la entrega del zaqat advirtiendo que aquel que no lo hiciera sería ejecutado. Véase el texto reproducido y comentado en ARÍSTEGUI, Gustavo: La Yihad en España. La obsesión por reconquistar Al-Andalus Madrid, la Esfera de los Libros, 2005. Véase en especial su segundo capítulo.
[5]Véase "Going south: Al-Qaeda's Algerian allies open up new front in desert" en <www.dailystar.com.lb> de 21 marzo 2004.
[6]"Algerian rebel gets life sentence" en <http://news.bbc.co.uk> de 26 junio 2005.
[7]"Magreb. Islamistas rehabilitados" ISPE nº 469, 29 agosto 2005, p. 7.
[8]Dicho entreguismo, rechazado tanto por el GSPC y sus grupos afines como por los restos del GIA, ha llevado a relevantes líderes del Ejército Islámico de Salvación (EIS) como su antiguo líder Medani Mezrag a apoyar el referéndum de 29 de septiembre de 2005. Mezrag se benefició de la amnistía anterior - bajo la Ley de Concordia Civil de 1999 - y es visto por los círculos yihadistas como un traidor. Es importante destacar que otras figuras relevantes del FIS - diputados, alcaldes o miembros de la Ejecutiva del partido - Majlis Achoura -, hasta ahora huídos en Europa, han ido regresando discretamente a Argelia en el contexto de la celebración de dicho referéndum. Algunos se han integrado en el Movimiento para el Renacimiento Nacional (MRN) del jeque Abdallah Djaballah y otros incluso en el Frente de Liberación Nacional (FLN). Véase "...et pour des dirigeants de l'ex-FIS" Jeune Afrique-l'Intelligent de 2 octubre 2005 en <www.lintelligent.com>.
[9]Esta felicitación pone también de manifiesto la unicidad del campo de batalla yihadista. Véase "Al Qaeda in Iraq Issues Statement Congratulating the Mujahideen in Algeria for Their Attack in Mauritania" en <www.siteinstitute.org> de 15 junio 2005.
[10]Véase "El líder islamista argelino Belhadj, inculpado por apología terrorista" El País 2 agosto 2005, p. 4.
[11]GAÏDI, M.F.: "Affaire du réseau d'Al Qaïda à Annaba" El Watan Économie 9 octubre 2005 en <www.elwatan.com>.
[12]Véase "España entrega a Argelia a dos presuntos terroristas islamistas" El País 5 noviembre 2005, p. 23.
[13]Uno de los detenidos, Abdelhamid Bouchema, había sido deportado desde Holanda en 2004 por ser considerado una "amenaza para la seguridad nacional" tras el asesinato del cineasta Theo van Gogh. Véase RODRÍGUEZ, Jorge A.: "Desarticulada una red de apoyo y financiación del terrorismo islamista" El País 24 noviembre 2005, p. 21, y "Spain Arrests 10 Suspected Members of Algerian Al-Qaeda Cell" de 24 noviembre 2005 en <www.bloomberg.com>.
[14]Sobre las raíces históricas del salafismo marroquí véase el interesante artículo en clave histórica de BOUKHARS, Anouar: "The Origins of Militancy and Salafism in Morocco" The Jamestown Foundation Vol. 3, nº 12, 17 junio 2005, en <http://jamestown.org/terrorism>.
[15]Los "takfiristas" son seguidores del grupo Takfir wal Hijra (Excomunión y Exilio), corriente muy radicalizada que es partidaria de la excomunión del poder y de la sociedad. Sobre las detenciones citadas en Marruecos véase DARIF, Mohamed: "El radicalismo religioso en el Magreb" Afkar/Ideas nº 3, verano 2004, pp. 75-76.
[16]Los tres saudíes condenados por dichos planes fueron enviados a Arabia Saudí en enero de 2004 para que cumplan allí el resto de sus condenas de diez años de prisión. Véase Al Jazeerah: "Three Al Qaeda members sent from Morocco to Saudi Arabia" 11 enero 2004 en <www.aljazeerah.info>.
[17]Véase DARIF, M.: op cit p. 78.
[18]Pew Research Center for the People and the Press: A Year After the Iraq War (2004) en <www.people-press.org>.
[19]Noticia aparecida en el diario marroquí Al Ahdath Al Maghribia de 10 agosto 2004.
[20]Véase "Morocco lost 400 Al Qaeda men" en <www.cnn.com> de 25 julio 2004.
[21]Los jeques Abu Hafs y Hassan el Kettani están hoy en prisión como también lo están los jeques Fezzazi y Haddouchi. Los cuatro apoyaron la huelga de hambre de más de 700 prisioneros islamistas en once cárceles marroquíes en marzo de 2005.
[22]Véase Revista de Prensa Magrebí: "Ataque contra los jefes de la Salafiya Yihadia" Al Ayan 12 mayo 2005, en <www.boletin.org>.
[23]Véase "Morocco remands 17 suspected al Qaeda activists" en <www.alertnet.org/thenews/newsdesk/GHA139272.htm> de 25 noviembre 2005. Véase también DE VEGA, Luis: "Marruecos detiene a 17 personas a las que acusa de pertenecer a Al Qaida" ABC 21 noviembre 2005, p. 26.
[24]Véase DE VEGA, L.: "Marruecos amplía el arresto preventivo de los miembros de la célula de Al Qaida" ABC 22 noviembre 2005, p. 26.
[25]El 9 de septiembre de 2001 dos terroristas tunecinos asesinaban al Comandante Ahmed Shah Massoud en Tayikistán obedeciendo órdenes de Al Qaida. Por otro lado el líder histórico de Ennahdha, Rachid Ghannouchi, vive en Londres desde agosto de 1993, fecha en la que obtuvo el estatuto de refugiado político en el Reino Unido. A título de ejemplo de activistas tunecinos en el exterior, y junto al caso de Ferhat "El Tunecino" como coautor del 11-M y que suicidara en el piso de Leganés el 3 de abril de 2004, véase el caso de Ihsan Garnaoui, condenado a 3 años de prisión en abril de 2005 por un tribunal de Berlín acusado de intentar crear una célula de Al Qaida en la ciudad. Véase "Court acquits Tunisian of trying to set up al-Qaeda cell" en <www.expatica.com> de 6 abril 2005.
[26]Este caso es uno de los escasísimos ejemplos de cooperación antiterrorista eficaz entre países magrebíes - de hecho en el presente estudio sólo podemos citar el presente y el del argelino Saïfi, número dos del GSPC - que debería de servir de referencia para trabajar en ese sentido en el futuro. Véase "Mediterráneo. Aproximaciones diplomáticas" ISPE nº 304, 25 febrero 2002, p. 7.
[27]Véase "Ben Ali vows no dialogue with Islamists" en <www.middle-east-online.com/english/tunisia/?id=14111>.
[28]Véase Kalimatunisie: "Les négociations avec le pouvoir divisent le parti Ennahdha" de 30 mayo 2005, en <www.kalimatunisie.com>.
[29]Véase <www.akhbar-libya.com> de 31 mayo 2005.
[30]Véase "Mauritania: Terrorist cell said linked to Al Qaeda dismantled, police" en <www.alertnet.org> de 28 abril 2005.
[31]Véase "Police say Al-Qaeda recruiting in Mauritania" en <www.dailystar.com.lb> de 11 mayo 2005.
[32]"Mauritania: New wave of arrests presented as crackdown on Islamic extremists" en <www.alertnet.org> de 12 mayo 2005.
[33]Véase sobre el ataque de Lemgheity ECHEVERRÍA JESÚS, C.: "'Flintlock 2005': cooperación multinacional contra el terrorismo en el Sahel" War Heat Internacional nº 31, VIII/2005, pp. 40-42.
[34]ECHEVERRÍA JESÚS, Carlos: "Lucha antiterrorista: la Iniciativa Pan-Sahel" Ejército nº 760, julio-agosto 2004, pp. 107-108.
[35]Sobre el ataque a la comisaría en Aioun véase "Police say Al-Qaeda recruiting in Mauritania" op cit.
[36]Véase ECHEVERRÍA JESÚS, C.: 'Flintlock 2005 op cit p. 42.
[37]Véase la entrevista con el Coronel Ely Ould Mohamed Vall en SOUDAN, François: "Croyez-moi, tout va changer" Jeune Afrique/l'Intelligent, octubre 2005 en <www.lintelligent.com>.
Extraído de la página web del GEES (Grupo de Estudios estratégicos):
www.gees.org
Un saludo!
