El profesor de derecho penal interrumpió su magistral alocucion para reprochar nuestra conducta.
Pero no podíamos parar de reír. Fue como un ataque incontrolado.
En el descanso del curso de actualización en materia penal, no paramos de contar chistes y chascarrillos. Eso motivó nuestra desatada conducta.
¿recuerdas? A punto estuvo el profesor de echarnos de clase.
Ahora no puedo parar de pensar en ese día ni en tantos que compartimos con los tuyos y con los míos.
La carretera, la moto, las barras al lado de la autovía. ....... te han apartado de los que te queremos.
Te aseguro amigo manu que jamás te olvidaré y tú lo sabes. Y estarás al lado de tantos y tantos compañeros que nos han ido dejando y que a buen seguro velareis por los que estamos por aquí aún.
Por cierto, guardan un buen destino en esa comisaría del cielo donde todos terminamos tarde o temprano.
Dicen que de Madrid al cielo. Pero tu has ido al cielo desde Málaga.
Un abrazo amigo mio.